La Comunidad Valenciana genera ya el 25% del paro en España por la crisis industrial y de la construcción

VALENCIA.- El objetivo del pleno empleo para finales de la legislatura tiene visos de convertirse en una quimera inalcanzable para el gobierno autonómico. Las últimas cifras de desempleo han supuesto una vuelta a la realidad para el mercado laboral de la Comunidad Valenciana: cuando la industria y la construcción se resfrían, el empleo enferma, a juicio del diario "Levante".

Y es que según datos del INEM, Alicante, Valencia y Castellón generan uno de cada cuatro parados nuevos que han surgido en España en el último año. De este modo, el número de parados en nuestro país se incrementó durante agosto pasado en comparación con el mismo mes de 2006 en 44.619 personas, de las que 11.351 corresponden a la Comunidad Valenciana.

Las preocupantes cifras de agosto confirman que el componente estacional por el cese de la actividad veraniega ya no puede utilizarse como causa fundamental del acentuado repunte del desempleo. Al fondo se sitúan la crisis estructural de la industria y la desaceleración del sector más dinámico de la economía autonómica, la construcción.

El incremento del paro en cifras interanuales fue del 5,77%, frente al aumento del 2,25% de media en España. De los más de 13.000 desempleados generados en agosto, 3.150 corresponden a la industria, mientras que 5.115 están ligados a la actividad inmobiliaria.

Mientras que los sindicatos y la patronal ya reconocen el delicado momento que atraviesa el empleo en la Comunidad Valenciana, el Consell se mantiene firme en su discurso oficial. «El incremento del paro registrado está en la línea del que se produce todos los años en agosto», aseguró esta semana el secretario autonómico de Empleo, Luis Lobón.

No obstante, esta aparente normalidad, en la que 13.084 personas pasaron a engrosar en agosto las listas del paro en la Comunidad Valenciana, supuso la peor cifra de paro registrado durante este mes en los últimos cinco años. Tan sólo en el ejercicio anterior, con 9.500 desempleados en agosto, se llegó a cotas cercanas a esos más de 13.000 parados, ya que por ejemplo, en 2003, el ascenso del desempleo alcanzó las 4.536 personas.

Asimismo, si hay alguna parte de la Comunidad Valenciana donde se deja notar este agotamiento del mercado laboral es en Alicante, donde la recesión de los sectores manufactureros y el bajón inmobiliario, sumada al bajón estacional de los servicios, se han cebado con el empleo.

No en vano, la provincia alicantina tiene el dudoso honor de concentrar más de la mitad del paro de la Comunidad Valenciana en el sector de la industria, con 23.327 parados sobre un total de 44.400. Del mismo modo, el ladrillo alicantino acapara actualmente el 48,9% del desempleo autonómico en esta actividad: de 25.035 personas sin trabajo en este sector, 12.259 residen en la provincia de Alicante.- (EPI)