jueves, 11 de octubre de 2007

Almería y Málaga son las provincias andaluzas de mayor avance económico en el último duodenato

MÁLAGA.- Analistas Económicos de Andalucía, sociedad de estudios del Grupo Unicaja, han presentado el número 50 de su publicación trimestral “Previsiones Económicas de Andalucía”, correspondiente a Septiembre de 2007.

Los principales indicadores de coyuntura de Andalucía aproximan un panorama relativamente positivo, aunque comienzan a percibirse con más claridad los signos de ralentización que ya se intuían en trimestres anteriores. De este modo, de acuerdo con las estimaciones realizadas, el crecimiento económico en el segundo trimestre de este año habría sido del 3,6%, lo que supondría una décima menos respecto al trimestre anterior.

Este ritmo de avance prolonga el suave perfil de desaceleración que se viene registrando desde finales del pasado año 2006, apreciándose una tendencia similar a la registrada por el conjunto de la economía española.

El mejor perfil de la coyuntura económica en Andalucía corresponde a la trayectoria que muestran los indicadores del mercado trabajo y, en concreto, al empleo que mantiene un ritmo de aumento notable (4,4 % entre Abril y Junio), produciéndose incluso en comparación con el trimestre anterior una leve aceleración, aunque esta tasa resulte algo más moderada que la registrada en los tres últimos años. El sector de la construcción (ligado a la actividad residencial) y el gasto en consumo son los principales afectados por este menor impulso.

La demanda interna continúa siendo el principal soporte del crecimiento económico, y en particular el consumo privado, aunque en los últimos meses la inversión está tomando el relevo con una trayectoria más dinámica. En este sentido, los indicadores relacionados con el consumo vienen mostrando en los últimos meses una moderada flexión a la baja. Éste es el caso del comercio al por menor o las ventas en grandes superficies, siendo este perfil de ralentización en el crecimiento aún más acusado en el caso de las matriculaciones de turismos o la producción industrial de bienes de consumo. También empieza a perder intensidad el crédito al sector privado, aunque éste aún crece por encima del 20 % en un contexto de subida de tipos de interés y de mayor ponderación del riesgo por los mercados financieros.

Por el contrario, algunos de los indicadores relacionados con la inversión reflejan un mejor comportamiento en lo que va de año en comparación con el pasado ejercicio. Buen ejemplo de ello son la producción industrial de bienes de equipo y la utilización de la capacidad productiva para el caso de los bienes de inversión. Ésta última alcanza el nivel más alto desde 1993, un 86,4%, superando en más de diez puntos al correspondiente al segundo trimestre de 2006, y por encima de la media de la industria, denotando que el empuje de la inversión podría compensar la ligera desaceleración que se espera en el consumo.

La construcción y las actividades inmobiliarias se están viendo más afectadas por esta ligera ralentización en el crecimiento, con un avance previsto para este año que se sitúa unas décimas por debajo de la media del conjunto de sectores productivos andaluces. Sin embargo, la creación de empleo sigue siendo intensa, y de nuevo éste ha sido el sector donde más ha crecido la cifra de ocupados en términos relativos, concentrando la construcción a unos 500.000 trabajadores, un 15,5% del total de ocupados en la región andaluza. A pesar de ello, el paro en el sector se ha incrementado por cuarto trimestre consecutivo.

El sector servicios continúa siendo el principal responsable de la creación de empleo en Andalucía, concentrando casi las tres cuartas partes del incremento total registrado en la cifra de ocupados en el segundo trimestre, con alrededor de 100.700 trabajadores más que hace un año. Aún así, las tasas de variación registradas en 2007 evidencian una leve desaceleración en el ritmo de crecimiento del empleo con respecto a los ejercicios anteriores.

Previsiones económicas

Las perspectivas de crecimiento económico continúan siendo favorables para Andalucía, de acuerdo con las proyecciones elaboradas con la información disponible hasta el segundo trimestre. No obstante, acorde al cariz menos dinámico de algunos indicadores de coyuntura, se espera una senda de suave ralentización, que no impedirá que la economía regional alcance un positivo ritmo de crecimiento del 3,6% en el conjunto del año 2007.

Las recientes dudas en los mercados financieros internacionales no tendrán efectos significativos sobre la marcha de la economía regional y nacional en el presente ejercicio, aunque la menor holgura en las condiciones monetarias y crediticias, podría posiblemente restar algunas décimas al crecimiento en el año 2008.

Las señales de moderación que muestran algunos indicadores de demanda –y en concreto los de consumo, así como la menor capacidad de empuje del sector construcción proseguirán en la segunda mitad de 2007, determinando una suavización del crecimiento económico. Destaca la fortaleza que seguirá exhibiendo el mercado de trabajo, y en particular, la creación de empleo.

En este sentido, de acuerdo con las estimaciones, el número de ocupados en Andalucía aumentará, en el promedio del 2007, hasta las 3.250.000 personas, lo que supone una cota histórica para la Comunidad Autónoma andaluza. Este aumento del empleo será, además, compatible con un descenso de la población parada (en torno a las 443.000 personas), y con una reducción de la tasa de paro, que previsiblemente se situará en el 11,7% a finales del ejercicio, unos cuatro puntos por encima de la correspondiente al conjunto español.

La positiva trayectoria esperada del mercado laboral se apoyará en la notable capacidad de creación de empleo que mostrarán los servicios y la construcción, con tasas de crecimiento interanuales superiores al 5% y 6%, respectivamente, previstas en el conjunto de 2007. En el caso de la construcción, no obstante, se apreciará un aumento menos intenso en el ritmo de aumento del empleo respecto a años anteriores.

También cabe subrayar el signo favorable del empleo industrial, que rompiendo la tendencia a la destrucción de puestos de trabajo en 2006, se prevé consiga un discreto avance este año. La modesta mejoría de la actividad manufacturera tendrá un reflejo limitado en los índices de producción industrial, con una reanimación en el caso de los bienes de equipo.

Actividad económica en las provincias andaluzas

El análisis de la situación económica en las provincias andaluzas durante el segundo trimestre de 2007 muestra un buen comportamiento de la actividad, con un ritmo de crecimiento, en general, sostenido. Así, se prolonga la senda expansiva de anteriores trimestres, si bien a un ritmo ligeramente más moderado dados los síntomas de desaceleración en la actividad constructora y la ralentización en el avance de los indicadores de demanda.

En este contexto, que presenta rasgos comunes a los de los agregados regional y nacional, Huelva resulta, según las estimaciones, la provincia con un mayor crecimiento de la actividad productiva, seguida de Málaga y Cádiz, teniendo Almería y Sevilla un ritmo de avance de la actividad económica más modesto.

Las provincias del litoral vuelven a experimentar una mayor creación de empleo, con la excepción de Almería. Principalmente, este repunte se ha basado en el sector servicios, aunque el empleo en la construcción también ha aumentado en casi todas las provincias, excepto en Huelva y Málaga.

En cambio, la agricultura refleja cierta atonía, mientras la población ocupada en la industria cayó en el segundo trimestre en Sevilla, Cádiz, Córdoba y Jaén. Desde la perspectiva del paro, la trayectoria ha sido menos favorable en la provincia sevillana, con un aumento de la tasa de desempleo, en comparación con el mismo período de 2006. El lado más positivo de los indicadores del mercado de trabajo corresponde a las provincias de Huelva, Málaga y Cádiz.

Los indicadores relacionados con el sector construcción apuntan, en líneas generales, un menor crecimiento en el conjunto de las provincias andaluzas, reduciéndose en el primer trimestre el número de viviendas iniciadas en casi todas, salvo en la de Granada, y aumentando los visados únicamente en Córdoba, Huelva y Jaén.

El mercado hipotecario, de modo similar, refleja signos de moderación en el primer semestre, reduciéndose las hipotecas constituidas en cuatro de las ocho provincias. Por su parte, el montante adjudicado de la licitación pública arroja, hasta mayo, incrementos en las provincias andaluzas (exceptuando Córdoba), en general con un mayor impulso de la obra civil, aumento este que en parte compensa el descenso en vivienda.

Mientras, el sector servicios mantiene una trayectoria, en general, positiva. Buena prueba de ello es la evolución favorable que presentan los principales indicadores del subsector hotelero en el balance provisional de los siete primeros meses del año, aumentando tanto la oferta como la demanda. No obstante, ha descendiendo la cifra de viajeros alojados en establecimientos hoteleros en Sevilla.

El comportamiento de los indicadores, en líneas generales, refleja mejores resultados en la demanda hotelera nacional –frente a la extranjera, principalmente en la costa occidental andaluza, acumulando Cádiz y Huelva 168.748 viajeros más que en el mismo periodo del año anterior.

Con respecto al nuevo indicador, introducido en el número anterior de “Previsiones Económicas de Andalucía”, que mide la temperatura económica de cada provincia, para el primer semestre del año 2007, en función de los signos positivos y negativos de las distintas variables económicas en cada provincia, (aunque sin computar su cuantía ni ponderación, sólo su saldo), Jaén registra la mayor temperatura económica (72,1), siendo la única junto con Huelva que supera la media andaluza (39,6).

Andalucía en los últimos 12 años

Con ocasión de la publicación del número 50 de este informe trimestral, “Previsiones Económicas de Andalucía”, se ha querido hacer un breve repaso a la trayectoria seguida por la economía y sociedad andaluzas durante estos últimos doce años. Para ello, se hace un análisis para Andalucía y España, de los distintos indicadores relacionados con la actividad económica, el mercado de trabajo, la demografía o las nuevas tecnologías, que pretenden reflejar en qué posición se encontraba Andalucía en 1995, año de inicio de esta publicación, y en qué posición se encuentra actualmente, contextualizando el avance o los cambios registrados en los últimos años dentro del entorno nacional.

En los años referidos en el análisis, Andalucía ha experimentado un intenso crecimiento y desarrollo económico, avanzando en el proceso de convergencia con la economía española y la Unión Europea. No obstante, en términos de PIB per cápita, persisten los diferenciales respecto a los promedios nacional y europeo, representando Andalucía algo menos del 80% de la media española y europea. En concreto, el crecimiento anual medio del PIB en el período 1995-2006 en el espacio regional habría superado en unas siete décimas al del conjunto nacional (4,4% en Andalucía frente al 3,7% de España).

Mientras, el ritmo de avance del empleo también se habría situado en torno a un punto por encima (5,1% en Andalucía frente al 4,2% de España). Este avance económico está estrechamente vinculado con uno de los cambios sociales más destacables de los últimos años, como ha sido el aumento de población procedente del extranjero, así como de otras Comunidades Autónomas españolas.

La construcción ha tenido un notable impulso, siendo el único sector productivo que ha incrementado su participación relativa en el conjunto de la economía andaluza en los últimos doce años, en detrimento sobre todo de la agricultura y la industria, representando actualmente en torno al 14% del VAB (Valor Añadido Bruto) andaluz, dos puntos más que en el conjunto de España, donde la industria tiene aún un mayor peso que la construcción.

Los índices de especialización productiva regional, tanto en términos de VAB como de empleo, muestran para la construcción valores superiores a la unidad, lo que pone de manifiesto una mayor presencia de este sector en Andalucía que en España, observándose asimismo un aumento en el índice de especialización respecto a mediados de los noventa.

El sector servicios sigue siendo el principal motor de la economía andaluza, concentrando el 70% del VAB regional, con un notable significado de la industria turística. En los últimos doce años, la cifra de viajeros se ha duplicado en la región andaluza, registrándose un ritmo de crecimiento anual en torno al 7% entre 1995 y 2006, representando el número de viajeros alojados en establecimientos hoteleros alrededor del 60% del total de turistas en Andalucía, correspondiendo el resto al turismo extrahotelero (apartamentos, viviendas propias, turismo rural…).

No obstante, desde 1999 se ha producido un leve descenso en el grado de ocupación hotelera, que se ha debido en gran medida al aumento de la oferta hotelera, que en el promedio de 2006 se situó en torno a las 225.000 plazas. Destaca la creciente importancia relativa de la demanda nacional frente a la extranjera, siendo esta tendencia más acusada en el espacio regional.

Desde la perspectiva provincial, en el promedio de los últimos doce años (1995-2006), ha sido Almería la que ha experimentado un mayor avance económico (con un crecimiento medio anual del 4,8%) -a diferencia de los resultados correspondientes al segundo trimestre de 2007-, seguida de Málaga y Cádiz, con crecimientos en torno al 4%. Córdoba y Jaén son las provincias que han registrado los crecimientos más discretos, cercanos al 3%.- (Teleprensa)
(Edificio del Banco de España en Málaga)

No hay comentarios:

Publicar un comentario