LISBOA.- Representantes de gobiernos, trabajadores y empleadores, así como de parlamentos, instituciones académicas y de la sociedad civil se reunirán desde mañana y hasta el próximo 2 de noviembre en Lisboa, Portugal, para discutir sobre el papel clave del trabajo decente para lograr la sostenibilidad económica, social y ambiental en el marco de una globalización "más justa e integradora", según informó hoy la Organización Internacional del Trabajo (OIT), responsable del evento.
En el encuentro se abordarán temas como los retos que implican el desarrollo de las calificaciones, la integración de las economías informales en la economía formal, la migración por razones laborales, la ampliación de la protección social, la superación de las desventajas y la discriminación, o los medios para mejorar la coherencia de las políticas entre las organizaciones internacionales.
Los asistentes debatirán además sobre la necesidad de lograr una globalización que sea justa, ofrezca mayores oportunidades, reduzca las desigualdades y responda a las demandas de las personas que esperan tener acceso al trabajo decente.
Aunque las soluciones deben tener en cuenta las especificidades de cada país "hay principios y temas comunes que pueden orientar el accionar de todos los países, como el respeto a las normas laborales fundamentales, la expansión de la cobertura de la seguridad social, la necesidad de contar con un marco para administrar las migraciones de trabajadores, el reto de la educación y la formación y la mejora en la transición", recuerda la OIT.
Para ello, señala, "es necesario fortalecer los procesos de diálogo para convocar a diferentes actores en el diseño de soluciones integradoras". "Para promover el trabajo decente para todos también es necesario ampliar ese diálogo a un contexto más amplio", recalca.
Y es que a su juicio, "el mundo aún no cuenta con un sistema social global para el siglo XXI". "Existen vacíos éticos, sociales y de gobernanza, y los conceptos de globalización justa y trabajo decente servirían para llenarlos", afirma la organización. Aunque se han producido mejoras, éstas "no se han traducido en la generación de empleos de suficiente nivel o valor y ha aumentado la brecha entre ricos y pobres". Asimismo, "el lento crecimiento del empleo formal deja a millones de trabajadores en la economía informal".
Como expectativas ante el Foro que comenzará mañana, la OIT recuerda que "existe un gran potencial en las sinergias que se pueden producir entre diferentes actores y redes ya existentes en torno a un programa para el trabajo decente y la globalización justa".
"Está claro que nadie tiene todas las respuestas, pero este Foro ofrecerá un espacio único para el debate y la interacción sobre cómo avanzar", asegura la OIT. Además, las discusiones "servirán para conectar el Programa de Trabajo Decente de la OIT con el tema más amplio de cómo lograr una globalización justa". - (Agencias)
En el encuentro se abordarán temas como los retos que implican el desarrollo de las calificaciones, la integración de las economías informales en la economía formal, la migración por razones laborales, la ampliación de la protección social, la superación de las desventajas y la discriminación, o los medios para mejorar la coherencia de las políticas entre las organizaciones internacionales.
Los asistentes debatirán además sobre la necesidad de lograr una globalización que sea justa, ofrezca mayores oportunidades, reduzca las desigualdades y responda a las demandas de las personas que esperan tener acceso al trabajo decente.
Aunque las soluciones deben tener en cuenta las especificidades de cada país "hay principios y temas comunes que pueden orientar el accionar de todos los países, como el respeto a las normas laborales fundamentales, la expansión de la cobertura de la seguridad social, la necesidad de contar con un marco para administrar las migraciones de trabajadores, el reto de la educación y la formación y la mejora en la transición", recuerda la OIT.
Para ello, señala, "es necesario fortalecer los procesos de diálogo para convocar a diferentes actores en el diseño de soluciones integradoras". "Para promover el trabajo decente para todos también es necesario ampliar ese diálogo a un contexto más amplio", recalca.
Y es que a su juicio, "el mundo aún no cuenta con un sistema social global para el siglo XXI". "Existen vacíos éticos, sociales y de gobernanza, y los conceptos de globalización justa y trabajo decente servirían para llenarlos", afirma la organización. Aunque se han producido mejoras, éstas "no se han traducido en la generación de empleos de suficiente nivel o valor y ha aumentado la brecha entre ricos y pobres". Asimismo, "el lento crecimiento del empleo formal deja a millones de trabajadores en la economía informal".
Como expectativas ante el Foro que comenzará mañana, la OIT recuerda que "existe un gran potencial en las sinergias que se pueden producir entre diferentes actores y redes ya existentes en torno a un programa para el trabajo decente y la globalización justa".
"Está claro que nadie tiene todas las respuestas, pero este Foro ofrecerá un espacio único para el debate y la interacción sobre cómo avanzar", asegura la OIT. Además, las discusiones "servirán para conectar el Programa de Trabajo Decente de la OIT con el tema más amplio de cómo lograr una globalización justa". - (Agencias)
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