RÍO DE JANEIRO.- Brasil ha encontrado El Dorado en forma de gigantesco yacimiento de petróleo en las aguas de Santos, en el Estado de São Paulo. La noticia fue anunciada por el Gobierno y por la compañía petrolera estatal Petrobras a bombo y platillo: las nuevas reservas, situadas a 6.000 metros de profundidad, se calculan en 8.000 millones de barriles, según informa hoy "El País".La cifra duplica prácticamente las reservas actuales de Brasil, estimadas en unos 12.000 millones de barriles. Como primera medida, y para preservar los recursos, el Gobierno ha decidido retirar de la subasta de concesiones prevista para el 27 y el 28 de noviembre 41 bloques de extracción.
Aunque habrá que esperar para la entrada en explotación de los nuevos pozos -que no será antes de 2013-, el anuncio del hallazgo -el mayor en el mundo desde 2000- disparó el valor de las acciones de Petrobras. El jueves, las acciones subieron un 15%. La portuguesa Galp, que tiene una participación del 10% en el yacimiento, se apuntó a la fiesta. Sus títulos han subido en dos días un 42%, con lo que la empresa aumenta su valor en Bolsa en unos 3.800 millones. Iberdrola posee un 4% de Galp.
La ministra de la Casa Civil, la ex guerrillera Dilma Rousseff, escogida por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva para dar la noticia a la nación, llegó a decir que el hallazgo puede convertir a Brasil en una "potencia del petróleo como los países árabes o Venezuela", quizá con algo de exageración. Según Rouseff, el descubrimiento podría "cambiar la cara del país" y convertirlo en uno de los mayores exportadores de crudo del mundo.
El anuncio de la ministra coincidió con un momento difícil para el Gobierno, cuando se habla de una posible crisis de energía debido al crecimiento económico. Hace unos días, la distribución de gas fue racionada en Río y São Paulo, aunque Petrobras tuvo que volver a abrir los grifos por una sentencia judicial que prohibió el racionamiento.
Los técnicos de Petrobras fueron más prudentes que Roussef. No quisieron arriesgarse a dar cifras de los nuevos hallazgos, que cubrirían una extensión de 800 kilómetros. Lo que sí dejaron claro es que el coste de la extracción del crudo puede ser muy elevado al encontrarse a kilómetros de profundidad.
A quienes acusaron ayer al Gobierno brasileño de haber lanzado la bomba informativa coincidiendo con la crisis del gas, el director de Exploración y Producción de Petrobras, Guilherme Estrella, les contestó que el anuncio se había hecho necesario, incluso en ausencia de Lula, presente en la cumbre iberoamericana, "para evitar especulaciones en Bolsa".
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