BARCELONA.- Los mercados de inversiones en oficinas de Madrid y Barcelona vieron reducida "sensiblemente" su actividad durante el segundo semestre de 2007 debido a la incertidumbre financiera, según informó hoy Aguirre Newman.
Con todo, los mercados de oficinas de Madrid y Barcelona recibieron en 2007 un volumen de inversión de 5.500 millones de euros, de los que 4.200 millones correspondieron a Madrid y otros 1.300 millones a la Ciudad Condal.
El impacto de la crisis crediticia desatada en Estados Unidos durante el pasado verano truncó la tendencia marcada en el primer semestre del año, caracterizado por una "gran liquidez" y por "unas expectativas positivas que alentaron al cierre de operaciones en niveles mínimos de rentabilidad inicial".
La consultora inmobiliaria afirmó que, "en un contexto de mayor inestabilidad, el análisis de las operaciones se ha vuelto a centrar en las rentabilidades iniciales que, por otra parte, han repuntado en ambas ciudades".
"Otro cambio de tendencia lo aporta el hecho de que el inversor internacional vuelva a recuperar el protagonismo cedido a los operadores nacionales durante los últimos ejercicios", añadió la consultora.
El volumen total de contratación de oficinas en Barcelona al cierre de 2007 alcanzó los 358.000 metros cuadrados, un 7% menos que el registrado en 2006, el segundo año de mayor absorción sólo por detrás de 2005.
Este descenso, señaló la consultora, fue consecuencia de la reducción de la contratación durante el último semestre, aunque el nivel de absorción se mantuvo por encima de la media de los últimos diez años.
Debido a la previsible rebaja de las expectativas empresariales se estima que la contratación no superará los 323.000 metros cuadrados en 2008, lo que supondrá una reducción del 10%.
En el mercado barcelonés, los nuevos proyectos de oficinas sumaron una superficie de 127.000 metros cuadrados durante 2007, algo menos de la mitad (47%) del volumen inicialmente previsto. Con la incorporación de esta nueva oferta, que se concentró en las zonas periféricas, el parque de oficinas de la capital catalana alcanzó los cinco millones de metros cuadrados.
Aguirre Newman precisó que "el importante volumen de nueva oferta prevista para los próximos dos años --más de 880.000 metros cuadrados-- va a ser clave en la evolución del mercado de oficinas de Barcelona, donde es previsible que aumente la tasa de disponibilidad".
Los precios de alquiler de las oficinas en Barcelona repuntaron en todas las zonas en 2007, especialmente en las que cuentan con más demanda y menor disponibilidad, mientras que la tasa de desocupación mantuvo estable, en el entorno del 5,8%.- (EP)
Con todo, los mercados de oficinas de Madrid y Barcelona recibieron en 2007 un volumen de inversión de 5.500 millones de euros, de los que 4.200 millones correspondieron a Madrid y otros 1.300 millones a la Ciudad Condal.
El impacto de la crisis crediticia desatada en Estados Unidos durante el pasado verano truncó la tendencia marcada en el primer semestre del año, caracterizado por una "gran liquidez" y por "unas expectativas positivas que alentaron al cierre de operaciones en niveles mínimos de rentabilidad inicial".
La consultora inmobiliaria afirmó que, "en un contexto de mayor inestabilidad, el análisis de las operaciones se ha vuelto a centrar en las rentabilidades iniciales que, por otra parte, han repuntado en ambas ciudades".
"Otro cambio de tendencia lo aporta el hecho de que el inversor internacional vuelva a recuperar el protagonismo cedido a los operadores nacionales durante los últimos ejercicios", añadió la consultora.
El volumen total de contratación de oficinas en Barcelona al cierre de 2007 alcanzó los 358.000 metros cuadrados, un 7% menos que el registrado en 2006, el segundo año de mayor absorción sólo por detrás de 2005.
Este descenso, señaló la consultora, fue consecuencia de la reducción de la contratación durante el último semestre, aunque el nivel de absorción se mantuvo por encima de la media de los últimos diez años.
Debido a la previsible rebaja de las expectativas empresariales se estima que la contratación no superará los 323.000 metros cuadrados en 2008, lo que supondrá una reducción del 10%.
En el mercado barcelonés, los nuevos proyectos de oficinas sumaron una superficie de 127.000 metros cuadrados durante 2007, algo menos de la mitad (47%) del volumen inicialmente previsto. Con la incorporación de esta nueva oferta, que se concentró en las zonas periféricas, el parque de oficinas de la capital catalana alcanzó los cinco millones de metros cuadrados.
Aguirre Newman precisó que "el importante volumen de nueva oferta prevista para los próximos dos años --más de 880.000 metros cuadrados-- va a ser clave en la evolución del mercado de oficinas de Barcelona, donde es previsible que aumente la tasa de disponibilidad".
Los precios de alquiler de las oficinas en Barcelona repuntaron en todas las zonas en 2007, especialmente en las que cuentan con más demanda y menor disponibilidad, mientras que la tasa de desocupación mantuvo estable, en el entorno del 5,8%.- (EP)
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