domingo, 10 de febrero de 2008

Alemania presume de un excedente comercial récord

BERLÍN.- El 'made in' Alemania sigue dando alegrías a la primera economía europea, que el año pasado defendió su título de primer exportador mundial frente a China y puede alardear de tener un holgado excedente económico.
La vitalidad del comercio exterior chino, con un prominente desarrollo de las exportaciones, hacía temer por la supremacía de Alemania, campeona del mundo en esta disciplina desde 2003. Pero las cifras publicadas el viernes demuestran que no hay motivo de preocupación, al menos en lo que atañe a 2007, y ello a pesar de un euro fuerte.

Alemania vendió en el mundo bienes por un importe de 969.000 millones de euros, mientras que China embolsó 1,2 billones de dólares (841.000 millones de euros), con lo que la potencia europea sale airosa. Respecto a 2006, sus exportaciones crecieron un 8,5%.

La popularidad de los productos alemanes no se pone en duda. Los coches, como siempre, llevan la voz cantante: el año pasado unos 4,3 millones de vehículos fabricados en Alemania emigraron gracias a Volkswagen, Daimler, BMW, y también a Ford y General Motos (Opel), asentadas en el país.

Otro motivo de orgullo de Alemania son sus máquinas herramientas, por las que cobró 138.000 millones de euros en 2007. Estas máquinas, que por ejemplo sirven para la construcción de otras máquinas, tienen mucho éxito en países de Europa del Este, Rusia y entre algunos exportadores de petróleo.

En toda Alemania, y en particular en el sur y el suroeste, las pequeñas y medianas empresas, muchas de las ellas de carácter familiar, se han especializado hasta el extremo. Es el caso de G.W. Barth, líder mundial de máquinas para la elaboración del chocolate, o de Baader-Gruppe, experto en artilugios para la transformación del pescado.

A la larga, no obstante, "1.300 millones de chinos lo harán mejor que 82 millones de alemanes en términos de exportaciones", destaca Alexander Koch, analista del banco Unicredit. China superará a Alemania el año que viene, a más tardar, predice el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

"Pero no es motivo para preocuparse", estima Koch. Aunque el hecho de ser campeón mundial de exportaciones hinche de orgullo a los alemanes, todavía es más importante que su comercio exterior sirva de apoyo al crecimiento y que el balance comercial se mantenga sano.
En cuanto al primer punto, lo cierto es que "el comercio exterior no es autómaticamente la locomotora de la coyuntura", sobre todo con las sombrías perspectivas de crecimiento mundial, advertía recientemente el presidente de la federación de comercio BGA.

Pero las exportaciones, entendidas como sostén de la economía alemana, tienen por delante días de vino y rosas. "Pese al euro fuerte y la desaceleración de la economía mundial, la expansión de las exportaciones continuará en 2008, más moderada que en los últimos años, pero siempre a un ritmo sostenido", estima Koch.

En cuanto a la balanza comercial, Alemania tampoco tiene motivos para sonrojarse. Con un excedente de 199.000 millones de euros, aventaja mucho a Estados Unidos (que padece un déficit crónico) y a las economías europeas, en particular a Francia, con un recién anunciado déficit histórico de 39.000 millones de euros en 2007.

No hay comentarios:

Publicar un comentario