BRUSELAS.- La Comisión Europea aprobó hoy el plan de desarrollo rural de Andalucía, que estará dotado con 1.882 millones de euros de fondos comunitarios hasta 2013, y que tendrá como prioridades fomentar la competitividad de su sector agroalimentario, contribuir a un entorno natural sostenible y diversificar la calidad de vida en las zonas rurales.
La aportación de la UE representa el 73,37% del presupuesto total de este plan, que asciende a 2.565 millones de euros.
El plan de desarrollo rural de Andalucía se divide en tres ejes prioritarios. El primero, con una asignación presupuestaria de 1.106 millones de euros, de los que 774 vendrán de los fondos comunitarios, se centrará en fomentar el conocimiento y mejorar el potencial humano de la comunidad, así como reestructurar y desarrollar su potencial físico e innovación y mejorar la calidad de la producción, incluida la agrícola.
El segundo eje del plan se centra en potenciar el uso sostenible tanto de las tierras agrarias como las forestales del conjunto de la comunidad andaluza. A este efecto, Bruselas destinará 849 millones de euros, que representa el 45% del presupuesto total que alcanza los 1.131 millones de euros.
La tercera prioridad se centra por su parte en diversificar la economía rural de la comunidad, mejorar la calidad de vida en las zonas rurales, así como reforzar la cohesión territorial en el conjunto de Andalucía. El Ejecutivo comunitario desembolsará una partida de casi 29 millones de euros, es decir, tres cuartas partes del presupuesto total asignado a esta prioridad, de poco menos de 39 millones.
Finalmente, Andalucía contará con una ayuda comunitaria de casi 215 millones de euros (de un presupuesto total de 268 millones) para acciones relacionadas con el programa Leader, cuyo objetivo es diversificar la economía rural mediante la cooperación entre sectores privado y público, mejorar la calidad de vida en las zonas rurales y su gobierno. A ello hay que sumar una asistencia técnica por valor de 20 millones, de los que Bruselas aportará algo más de 15.
La Comisión destaca que Andalucía es una región eminentemente "forestal" con una superficie de masa forestal equivalente al 55% de su territorio. La Red Natura 2000 abarca el 29,56 % del territorio, del que un 63 % corresponde a superficies agrícolas y un 90% a masa forestal.
En cambio, la media de sus explotaciones agrícolas, de 17,3 hectáreas, es inferior a la media española, por encima de las 22 hectáreas, a pesar de que las explotaciones andaluzas representan el 24% del total en el conjunto de España.
El sector agrario emplea al 12% de la población, mientras que, por su parte, el agroalimentario, que se sitúa como el segundo más grande en toda España y absorbe el 15% del empleo en el sector en España, es especialmente importante en cuanto a producción de hortalizas, aceite de oliva y frutas.
De un total de población que asciende a 8 millones de habitantes en la comunidad, 2,6 millones vive en zonas rurales. Con una densidad poblacional de 86 habitantes por kilómetro cuadrado, el Producto Interior Bruto (PIB) per cápita en la comunidad no supera el 75% de la media comunitaria.
El desempleo en Andalucía alcanza casi al 13 por ciento de su población, mientras que tanto su nivel educativo, incluida la formación técnica en el sector agrario, es bajo en comparación con la media nacional.
La aportación de la UE representa el 73,37% del presupuesto total de este plan, que asciende a 2.565 millones de euros.
El plan de desarrollo rural de Andalucía se divide en tres ejes prioritarios. El primero, con una asignación presupuestaria de 1.106 millones de euros, de los que 774 vendrán de los fondos comunitarios, se centrará en fomentar el conocimiento y mejorar el potencial humano de la comunidad, así como reestructurar y desarrollar su potencial físico e innovación y mejorar la calidad de la producción, incluida la agrícola.
El segundo eje del plan se centra en potenciar el uso sostenible tanto de las tierras agrarias como las forestales del conjunto de la comunidad andaluza. A este efecto, Bruselas destinará 849 millones de euros, que representa el 45% del presupuesto total que alcanza los 1.131 millones de euros.
La tercera prioridad se centra por su parte en diversificar la economía rural de la comunidad, mejorar la calidad de vida en las zonas rurales, así como reforzar la cohesión territorial en el conjunto de Andalucía. El Ejecutivo comunitario desembolsará una partida de casi 29 millones de euros, es decir, tres cuartas partes del presupuesto total asignado a esta prioridad, de poco menos de 39 millones.
Finalmente, Andalucía contará con una ayuda comunitaria de casi 215 millones de euros (de un presupuesto total de 268 millones) para acciones relacionadas con el programa Leader, cuyo objetivo es diversificar la economía rural mediante la cooperación entre sectores privado y público, mejorar la calidad de vida en las zonas rurales y su gobierno. A ello hay que sumar una asistencia técnica por valor de 20 millones, de los que Bruselas aportará algo más de 15.
La Comisión destaca que Andalucía es una región eminentemente "forestal" con una superficie de masa forestal equivalente al 55% de su territorio. La Red Natura 2000 abarca el 29,56 % del territorio, del que un 63 % corresponde a superficies agrícolas y un 90% a masa forestal.
En cambio, la media de sus explotaciones agrícolas, de 17,3 hectáreas, es inferior a la media española, por encima de las 22 hectáreas, a pesar de que las explotaciones andaluzas representan el 24% del total en el conjunto de España.
El sector agrario emplea al 12% de la población, mientras que, por su parte, el agroalimentario, que se sitúa como el segundo más grande en toda España y absorbe el 15% del empleo en el sector en España, es especialmente importante en cuanto a producción de hortalizas, aceite de oliva y frutas.
De un total de población que asciende a 8 millones de habitantes en la comunidad, 2,6 millones vive en zonas rurales. Con una densidad poblacional de 86 habitantes por kilómetro cuadrado, el Producto Interior Bruto (PIB) per cápita en la comunidad no supera el 75% de la media comunitaria.
El desempleo en Andalucía alcanza casi al 13 por ciento de su población, mientras que tanto su nivel educativo, incluida la formación técnica en el sector agrario, es bajo en comparación con la media nacional.
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