lunes, 18 de febrero de 2008

El Gobierno oculta un alarmante informe que habla claro de la crisis, según "Negocio"

MADRID.- Un documento reservado realizado por el Servicio de Auditoria Interna de la Agencia Tributaria para el Gobierno, fechado el 1 de febrero, desgrana sin tapujos a partir de los datos proporcionados por las Grandes Empresas en diciembre de 2007 el proceso de “caída”, la “negativa evolución” y la “desaceleración” económica, términos que el presidente José Luis Rodríguez Zapatero y los responsables económicos se niegan a pronunciar, según "Negocio".

Mientras que este informe sobre Coyuntura económica y recaudación tributaria no ha visto la luz, o estó siendo ocultado, en la página de Hacienda hay otro sobre los datos de ese mes con el título Ventas, empleo y salarios de las Grandes Empresas, más reducido y que elimina los duros datos que aparecen en el que obra en poder de "Negocio".

Según comienza su estudio el Servicio de Auditoria de la Agencia Tributaria, “de la información de las ventas declaradas por las Grandes Empresas en diciembre se deduce una profundización de la tendencia bajista que se observa desde el segundo trimestre”.

Por ejemplo, las ventas totales “caen un 0,5% respecto a diciembre de 2006”, y añade, “desde 1996 sólo en una ocasión se había registrado una tasa negativa en esta serie; fue en junio de 2002”. El cuarto trimestre se cierra con un crecimiento del 1% lo que supone, según estos expertos, “una fuerte desaceleración frente al trimestre anterior”.

El año por tanto se salda provisionalmente con “un incremento del 3,2%, 1,5 puntos por debajo de la cifra estimada para 2006”.

Sobre las ventas interiores se asegura que presentan “una caída superior a las ventas totales” y explica que “la causa fundamental continúa siendo la negativa evolución de la construcción y la promoción inmobiliaria, agudizada por el mal dato de la primera al compararse con la transitoria recuperación que se produjo en el sector a finales de 2006 y comienzos de 2007”.

Por su parte, “el consumo ofrece una cierta mejora”, pero según se aclara “es efecto una vez más de algunos datos atípicos en los servicios que ocultan el empeoramiento del consumo de bienes, pero no evitan la desaceleración en términos trimestrales”.

El deflactor de las ventas interiores presenta un incremento medio en los últimos meses “superior al 5%, muy por encima de los crecimientos de los primeros nueve meses”.

Las tensiones comenzaron, aseguran, “en septiembre con la escalada de precios del petróleo, posteriormente se unieron las subidas en los alimentos y finalmente se han extendido, con menor intensidad, a la industria y los servicios”.

Algo mejor se finaliza en el apartado de exportaciones, “que ofrecen un perfil más positivo”; la recaudación neta del IVA, que se salda por encima del 10%, y que no se ha visto tan afectada “por la desaceleración de la actividad”, explica el informe.

En cuanto a las retenciones del trabajo, “cierran un año de Reforma con un crecimiento del 5,9%, con tendencia a la baja debido a la ralentización en la creación de empleo”. El tipo “se ha reducido cerca de un punto”.

El informe continúa desglosando en su introducción datos nada alentadores. Las ventas interiores no financieras “han disminuido en diciembre un 1,5%”, es decir, “el trimestre se queda con un crecimiento igual a cero y el incremento del año se estima en un 3,1 por ciento, alejado del 4,5 por ciento de 2006”.

Especial explicación se da sobre lo sucedido en el sector de la construcción y la promoción inmobiliaria, unos protagonistas que han tenido “durante todo el año una trayectoria muy negativa”, aunque parecía que “el mínimo se hubiera producido en el tercer trimestre”.

Sin embargo, según se recoge, “este ligero repunte coincide con un dato muy desfavorable de la construcción como consecuencia de su comparación con la transitoria recuperación que se produjo en los últimos meses de 2006 y en los iniciales de 2007, ligada a la finalización de un gran volumen de obra pública”.

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