LONDRES.- Las Bolsas europeas y asiáticas se deplomaron este jueves en un arrebato de inquietud suscitado entre los inversores por los nuevos temores sobre la crisis del crédito, la debilidad del dólar y los precios récord del petróleo, según los corredores.
Los mercados financieros mundiales se ensombrecieron después de que el fondo de inversiones Carlyle Capital Corporation (CCC) anunciase este jueves que no puede lograr un acuerdo con sus acreedores y que por tanto éstos tomarán posesión de todos sus activos restantes tras no poder pagar cerca de 17.000 millones de dólares de deuda.
Según los analistas, esto atizó los temores de que lo peor no haya pasado aún en la crisis mundial del crédito, pese a la euforia inicial que había suscitado el anuncio el martes de una acción coordinada de los grandes bancos centrales, entre ellos la Reserva Federal estadounidense (Fed), para inyectar nueva liquidez en el sector bancario.
Este jueves al cierre de las plazas en Asia, la Bolsa de Tokio perdió un 3,3% y Hong Kong cayó un 4,8%, mientras Seúl retrocedía 2,6%, Sidney un 2,3% y Shanghai 2,4%.
En la apertura de los mercados en Europa, la Bolsa de Londres se desplomó un 2,11%, Francfort cayó un 2,45% y París retrocedió un 2,33%, debido a que los mercados se vieron también afectados por las tomas de beneficios.
En el mercado de cambio de divisas, el dólar cayó por debajo de la barrera de los 100 yenes por primera vez en 12 años y alcanzó un nuevo récord negativo frente al euro en un clima de preocupación sobre la salud de la economía estadounidense.
Hacia las 9 horas GMT, el euro llegó a 1,5625 dólares en Londres, poco después de que el billete verde alcanzase frente a la divisa japonesa su nivel más bajo desde el 10 de noviembre de 1995, al situarse en 99,80 yenes por dólar al final de la jornada en Tokio.
Un euro fuerte encarece las exportaciones de los países de la Eurozona al tiempo que incrementa el peso de los precios del petróleo en los costes y desata la inflación. Los precios del crudo alcanzaron un nuevo récord el miércoles al situarse por encima de los 110 dólares el barril.
"Era sólo una cuestión de tiempo antes de que se produjesen las retiradas de beneficios después de la acción de la Fed del martes", consideró Claire Collingwood, corredora de la firma CMC Markets.
"El clima comenzó a cambiar justo antes del cierre de Wall Street ayer (miércoles) cuando los precios del crudo superaron los 110 dólares el barril por primera vez en la historia, lo cual agravó los temores de una recesión en Estados Unidos", agregó.
Los mercados recibieron un nuevo golpe cuando se anunció la liquidación de CCC, que cotiza en la Bolsa de Amsterdam y está vinculado a los fondos de inversión Carlyle Group, uno de los más conocidos en Estados Unidos y a los que están asociados como consejeros ex dirigentes políticos como el que fuera presidente estadounidense George Bush.
"Las malas noticias sobre Carlyle pueden ser un factor negativo que podría acarrear problemas para el mercado estadounidense", consideró Tsuyoshi Segawa, analista de Shinko Securities.
La cotización de CCC en la Bolsa de Amsterdam fue suspendida el viernes antes de reanudarse brevemente el martes, para cesar de nuevo debido a la avalancha de órdenes de venta.
"El problema es que parece poco probable que Carlyle Capital Corp sea el último fondo en dificultades y de hecho, existen rumores relativos a otros fondos en situaciones similares que contribuirán a agravar el sentimiento de los inversores en los próximos días y semanas", afirmó Lee Hardman, analista de The Bank of Tokyo-Mitsubishi UFJ.
Según los corredores, los inversores están también preocupados por el creciente precio del petróleo, que provoca presiones inflacionistas y podría limitar el margen de la Fed para recortar aun más los tipos de interés en un intento de sacar a flote a la economía estadounidense.
Los mercados financieros mundiales se ensombrecieron después de que el fondo de inversiones Carlyle Capital Corporation (CCC) anunciase este jueves que no puede lograr un acuerdo con sus acreedores y que por tanto éstos tomarán posesión de todos sus activos restantes tras no poder pagar cerca de 17.000 millones de dólares de deuda.
Según los analistas, esto atizó los temores de que lo peor no haya pasado aún en la crisis mundial del crédito, pese a la euforia inicial que había suscitado el anuncio el martes de una acción coordinada de los grandes bancos centrales, entre ellos la Reserva Federal estadounidense (Fed), para inyectar nueva liquidez en el sector bancario.
Este jueves al cierre de las plazas en Asia, la Bolsa de Tokio perdió un 3,3% y Hong Kong cayó un 4,8%, mientras Seúl retrocedía 2,6%, Sidney un 2,3% y Shanghai 2,4%.
En la apertura de los mercados en Europa, la Bolsa de Londres se desplomó un 2,11%, Francfort cayó un 2,45% y París retrocedió un 2,33%, debido a que los mercados se vieron también afectados por las tomas de beneficios.
En el mercado de cambio de divisas, el dólar cayó por debajo de la barrera de los 100 yenes por primera vez en 12 años y alcanzó un nuevo récord negativo frente al euro en un clima de preocupación sobre la salud de la economía estadounidense.
Hacia las 9 horas GMT, el euro llegó a 1,5625 dólares en Londres, poco después de que el billete verde alcanzase frente a la divisa japonesa su nivel más bajo desde el 10 de noviembre de 1995, al situarse en 99,80 yenes por dólar al final de la jornada en Tokio.
Un euro fuerte encarece las exportaciones de los países de la Eurozona al tiempo que incrementa el peso de los precios del petróleo en los costes y desata la inflación. Los precios del crudo alcanzaron un nuevo récord el miércoles al situarse por encima de los 110 dólares el barril.
"Era sólo una cuestión de tiempo antes de que se produjesen las retiradas de beneficios después de la acción de la Fed del martes", consideró Claire Collingwood, corredora de la firma CMC Markets.
"El clima comenzó a cambiar justo antes del cierre de Wall Street ayer (miércoles) cuando los precios del crudo superaron los 110 dólares el barril por primera vez en la historia, lo cual agravó los temores de una recesión en Estados Unidos", agregó.
Los mercados recibieron un nuevo golpe cuando se anunció la liquidación de CCC, que cotiza en la Bolsa de Amsterdam y está vinculado a los fondos de inversión Carlyle Group, uno de los más conocidos en Estados Unidos y a los que están asociados como consejeros ex dirigentes políticos como el que fuera presidente estadounidense George Bush.
"Las malas noticias sobre Carlyle pueden ser un factor negativo que podría acarrear problemas para el mercado estadounidense", consideró Tsuyoshi Segawa, analista de Shinko Securities.
La cotización de CCC en la Bolsa de Amsterdam fue suspendida el viernes antes de reanudarse brevemente el martes, para cesar de nuevo debido a la avalancha de órdenes de venta.
"El problema es que parece poco probable que Carlyle Capital Corp sea el último fondo en dificultades y de hecho, existen rumores relativos a otros fondos en situaciones similares que contribuirán a agravar el sentimiento de los inversores en los próximos días y semanas", afirmó Lee Hardman, analista de The Bank of Tokyo-Mitsubishi UFJ.
Según los corredores, los inversores están también preocupados por el creciente precio del petróleo, que provoca presiones inflacionistas y podría limitar el margen de la Fed para recortar aun más los tipos de interés en un intento de sacar a flote a la economía estadounidense.
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