MADRID.- El secretario de Estado de Hacienda en funciones, Carlos Ocaña, descartó hoy la posibilidad de que el futuro Gobierno aumente las deducciones por la compra de vivienda habitual para fomentar la demanda del sector ante un periodo de clara desaceleración.
En una rueda de prensa para valorar las cuentas financieras del Estado, Ocaña resaltó que la actual situación del sector requiere la atención de los agentes económicos, aunque rechazó las medidas que esta semana propusieron empresarios y asesores fiscales, que pasan por actualizar la desgravación por compra de vivienda habitual con el fin de reactivar la compraventa de inmuebles.
En cambio, aseguró que el Gobierno desarrollará otras iniciativas para hacer frente a la actual situación, entre las que destacó el fomento de la obra pública en España y la rehabilitación de los cascos urbanos más antiguos para compensar el descenso de la actividad en la obra privada.
Según Ocaña, el modelo actual de IRPF ya contempla la deducción por la compra de vivienda habitual y ampliar dicha desgravación "no serviría de nada" porque no beneficiaria ni a los consumidores ni supondría la reactivación del mercado.
"Haremos otras cosas", señaló el secretario de Estado, tras insistir, de nuevo, en la necesidad de cambiar el modelo de crecimiento de la economía española para que la construcción pierda peso en el mismo.
En otro orden de cosas, Ocaña adelantó que el futuro Gobierno ampliarán el plazo del primer pago fraccionado del Impuesto de Sociedades a las empresas para garantizar la neutralidad fiscal ante la entrada en vigor del nuevo Plan General Contable.
Explicó que la nueva normativa introduce ciertos ajustes de adaptación para las empresas que no favorecen la neutralidad fiscal, como la forma de contabilizar los préstamos en moneda extranjera, razón por la que el Gobierno ampliará el plaza en Sociedades para garantizar la aplicación de la contabilidad antigua y disponer así de más tiempo para encontrar la fórmula adecuada.
Asimismo, aseguró que el Ejecutivo ofrecerá diversas posibilidades a las empresas para que puedan optar por este pago fraccionado del impuesto en base a sus resultados del año en curso o del último año liquidado que, en este caso, sería el 2006.
En cuanto a la publicación de las balanzas fiscales, Ocaña reiteró que aún no hay fecha de publicación, aunque demostró el interés del Gobierno por darlas a conocer lo antes posible. "Es un ejercicio de transparencia", señaló.
Explicó que el Gobierno dispone de un grupo de trabajo que recopilará toda la información necesaria sobre las CC.AA. y que luego la hará pública partiendo de diversas metodologías por la disconformidad que existe ante la elaboración de dichas balanzas. "Los expertos no se ponen de acuerdo", indicó.
Para Ocaña, la publicación de las balanzas fiscales no debe utilizarse para determinar el sistema de financiación de las CC.AA., sino que simplemente se trata de un ejercicio de "transparencia" para dar a conocer a los ciudadanos los flujos financieros del territorio nacional.
En cuanto a la reforma del sistema de financiación autonómica, señaló que la intención del Gobierno es llevarla a cabo lo antes posible, por lo que será una de las prioridades después de que el actual presidente del Gobierno en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, forme un nuevo Ejecutivo.
En esta misma línea, aseguró que la deducción de 400 euros en el IRPF propuesta por el partido socialista será una de las medidas que el Ejecutivo llevará al Consejo de Ministros en forma de Decreto Ley, tras el debate de investidura y la formación del nuevo Gobierno.
En una rueda de prensa para valorar las cuentas financieras del Estado, Ocaña resaltó que la actual situación del sector requiere la atención de los agentes económicos, aunque rechazó las medidas que esta semana propusieron empresarios y asesores fiscales, que pasan por actualizar la desgravación por compra de vivienda habitual con el fin de reactivar la compraventa de inmuebles.
En cambio, aseguró que el Gobierno desarrollará otras iniciativas para hacer frente a la actual situación, entre las que destacó el fomento de la obra pública en España y la rehabilitación de los cascos urbanos más antiguos para compensar el descenso de la actividad en la obra privada.
Según Ocaña, el modelo actual de IRPF ya contempla la deducción por la compra de vivienda habitual y ampliar dicha desgravación "no serviría de nada" porque no beneficiaria ni a los consumidores ni supondría la reactivación del mercado.
"Haremos otras cosas", señaló el secretario de Estado, tras insistir, de nuevo, en la necesidad de cambiar el modelo de crecimiento de la economía española para que la construcción pierda peso en el mismo.
En otro orden de cosas, Ocaña adelantó que el futuro Gobierno ampliarán el plazo del primer pago fraccionado del Impuesto de Sociedades a las empresas para garantizar la neutralidad fiscal ante la entrada en vigor del nuevo Plan General Contable.
Explicó que la nueva normativa introduce ciertos ajustes de adaptación para las empresas que no favorecen la neutralidad fiscal, como la forma de contabilizar los préstamos en moneda extranjera, razón por la que el Gobierno ampliará el plaza en Sociedades para garantizar la aplicación de la contabilidad antigua y disponer así de más tiempo para encontrar la fórmula adecuada.
Asimismo, aseguró que el Ejecutivo ofrecerá diversas posibilidades a las empresas para que puedan optar por este pago fraccionado del impuesto en base a sus resultados del año en curso o del último año liquidado que, en este caso, sería el 2006.
En cuanto a la publicación de las balanzas fiscales, Ocaña reiteró que aún no hay fecha de publicación, aunque demostró el interés del Gobierno por darlas a conocer lo antes posible. "Es un ejercicio de transparencia", señaló.
Explicó que el Gobierno dispone de un grupo de trabajo que recopilará toda la información necesaria sobre las CC.AA. y que luego la hará pública partiendo de diversas metodologías por la disconformidad que existe ante la elaboración de dichas balanzas. "Los expertos no se ponen de acuerdo", indicó.
Para Ocaña, la publicación de las balanzas fiscales no debe utilizarse para determinar el sistema de financiación de las CC.AA., sino que simplemente se trata de un ejercicio de "transparencia" para dar a conocer a los ciudadanos los flujos financieros del territorio nacional.
En cuanto a la reforma del sistema de financiación autonómica, señaló que la intención del Gobierno es llevarla a cabo lo antes posible, por lo que será una de las prioridades después de que el actual presidente del Gobierno en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, forme un nuevo Ejecutivo.
En esta misma línea, aseguró que la deducción de 400 euros en el IRPF propuesta por el partido socialista será una de las medidas que el Ejecutivo llevará al Consejo de Ministros en forma de Decreto Ley, tras el debate de investidura y la formación del nuevo Gobierno.
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