BRUSELAS.- El 64% de los españoles está dispuesto a comprar productos ecológicos aunque ello implique pagar un poco más para contribuir a la protección del medio ambiente, pero sólo un 11% afirma haber adquirido algún artículo de este tipo durante el último mes, según una encuesta del Eurobarómetro publicada hoy por la Comisión Europea.
Estas cifras ponen de relieve que los españoles están menos sensibilizados con el medio ambiente que la media comunitaria, ya que en el conjunto de la UE cerca de un 75% de los ciudadanos está predispuesto a adquirir productos respetuosos con el entorno, y el 17% afirma que lo ha hecho en el último mes.
Para más del 96% de los españoles, proteger el medio ambiente es una prioridad (una cifra similar a la media europea). Los cinco principales problemas medioambientales que preocupan a los ciudadanos de España son el cambio climático (57%, el mismo porcentaje que la media UE); la contaminación de las aguas (38%); los desastres provocados por el hombre, como vertidos de petróleo o accidentes industriales (31%); los desastres naturales (30%); y el agotamiento de los recursos naturales (25%).
Otras cuestiones medioambientales inquietan menos a los españoles que al conjunto de los ciudadanos europeos. Entre ellos destaca el crecimiento de los residuos (citado sólo por el 7% de los españoles, frente al 24% de los europeos), el impacto sobre la salud de las sustancias públicas utilizadas en productos de uso diario (20% frente al 32%), el impacto del transporte (3% frente al 12%) o la utilización de transgénicos (13% frente al 20%).
El Eurobarómetro señala que, al igual que en el conjunto de la UE, la mayoría de los españoles ha llevado a cabo acciones concretas por motivos medioambientales: la separación de la basura para reciclar (52%), reducir el consumo de agua (37%) o reducir el consumo de energía (33%).
Para los españoles, la manera más eficaz de afrontar los problemas medioambientales sería introducir fuertes multas a los infractores (36%), garantizar una mejor aplicación de la legislación medioambiental vigente (35%) y dar más información sobre cuestiones medioambientales (31%). Estos porcentajes son muy similares a la media de la UE. En cambio, los españoles son menos partidarios que la media comunitaria de soluciones basadas en el mercado, como incentivos fiscales (16% frente a 29%).
Una gran mayoría de los encuestados considera que es necesaria una legislación europea armonizada sobre medio ambiente (83%), que la UE debe ayudar a los países terceros a mejorar sus normas medioambientales (86%), y que la UE debe destinar más fondos a la protección del medio ambiente (78%).
Estas cifras ponen de relieve que los españoles están menos sensibilizados con el medio ambiente que la media comunitaria, ya que en el conjunto de la UE cerca de un 75% de los ciudadanos está predispuesto a adquirir productos respetuosos con el entorno, y el 17% afirma que lo ha hecho en el último mes.
Para más del 96% de los españoles, proteger el medio ambiente es una prioridad (una cifra similar a la media europea). Los cinco principales problemas medioambientales que preocupan a los ciudadanos de España son el cambio climático (57%, el mismo porcentaje que la media UE); la contaminación de las aguas (38%); los desastres provocados por el hombre, como vertidos de petróleo o accidentes industriales (31%); los desastres naturales (30%); y el agotamiento de los recursos naturales (25%).
Otras cuestiones medioambientales inquietan menos a los españoles que al conjunto de los ciudadanos europeos. Entre ellos destaca el crecimiento de los residuos (citado sólo por el 7% de los españoles, frente al 24% de los europeos), el impacto sobre la salud de las sustancias públicas utilizadas en productos de uso diario (20% frente al 32%), el impacto del transporte (3% frente al 12%) o la utilización de transgénicos (13% frente al 20%).
El Eurobarómetro señala que, al igual que en el conjunto de la UE, la mayoría de los españoles ha llevado a cabo acciones concretas por motivos medioambientales: la separación de la basura para reciclar (52%), reducir el consumo de agua (37%) o reducir el consumo de energía (33%).
Para los españoles, la manera más eficaz de afrontar los problemas medioambientales sería introducir fuertes multas a los infractores (36%), garantizar una mejor aplicación de la legislación medioambiental vigente (35%) y dar más información sobre cuestiones medioambientales (31%). Estos porcentajes son muy similares a la media de la UE. En cambio, los españoles son menos partidarios que la media comunitaria de soluciones basadas en el mercado, como incentivos fiscales (16% frente a 29%).
Una gran mayoría de los encuestados considera que es necesaria una legislación europea armonizada sobre medio ambiente (83%), que la UE debe ayudar a los países terceros a mejorar sus normas medioambientales (86%), y que la UE debe destinar más fondos a la protección del medio ambiente (78%).
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