El OCEI prevé dos años de "tensión" en los precios de los alimentos y la inflación se mantendrá al 4% en 2008

VALENCIA.- El Observatorio de Coyuntura Económica Internacional (OCEI) vaticinó hoy que la "tensión" en los precios de los alimentos se mantendrá al menos dos años más y que la inflación se mantendrá al 4 por ciento a lo largo de 2008. Sin embargo, esperan que el precio del petróleo tienda a la baja en los próximos meses.

Así lo indicó hoy el director del OCEI, Vicente Pallardó, quien manifestó que los precios siguen una tendencia "alcista" y que la inflación "no es compatible con la estabilidad de los precios", precisamente por el precio del petróleo y las materias primas, así como por el precio de los alimentos.

En este sentido, Pallardó, que hoy presentó el informe de coyuntura de la OCEI, aseguró que, a lo largo de este año y del próximo, los precios de los alimentos "van a seguir creciendo a tasas importantes", lo cual, según dijo, "generará inflación que va a afectar, sobre todo, a las personas con menor poder adquisitivo".

Apuntó que los motivos de esta subida de precios son "un fuerte aumento" de la demanda de países emergentes; una desviación de las cosechas a biocombustibles; y algunas malas cosechas coyunturales, que, según apuntó, "algunos analistas creen que van a ser continuas por el cambio climático", aunque otros, entre los que se encuentra la posición de el OCEI, consideran que "son meramente circunstanciales".

Asimismo, añadió que hay un cuarto elemento, que es la actuación de los Gobiernos, que "está agravando el tema del precio de los alimentos, porque los Gobiernos que son exportadores de alimentos están limitando las exportaciones, por tanto hay menos oferta en los mercados; mientras que, los Gobiernos de los países que importan alimentos, intentan comprar cantidades elevadas para almacenar, dado que se prevé un mayor aumento de los precios". Así, Pallardó concluyó que "si los que venden venden menos, y los que compran compran más lógicamente el precio tiende a subir".

Sin embargo, Pallardó subrayó que, respecto a los precios de la energía, existe una "perspectiva favorable con todo lo que supone que la inflación se debe desacelerar", aunque matizó que este indicador "va a tardar bastante en volver a tasas que consideramos aceptables". Al respecto, añadió que la normalización de la inflación hasta tasas del 2 por ciento, se dará, "como pronto, a mediados del año que viene". Esto redundará, según apuntó, en que el Banco Central Europeo "no disminuya los tipos de interés".

No obstante, el director del OCEI aseguró que tenía "una visión relativamente positiva", en cuanto al precio del petróleo que, según dijo, "en los próximos meses tenderá a la baja, en lugar de seguir creciendo como lo está haciendo de forma continuada". Así, señaló que esto se debe a "la desaceleración económica, que va a contener la demanda".

Asimismo, agregó que hay "un volumen importante de fondos procedentes de los mercados financieros que han huido de los mismos a raíz de la crisis y que han ido a mercados como el del petróleo o el oro, presionando al alza sobre los precios". A medida que los mercados financieros se vayan "normalizando", Pallardó manifestó que los fondos "deben volver a los mercados financieros y, por tanto, los precios deben tender a la baja, aunque no desplomarse".

Por otra parte, el director del OCEI subrayó que existe una "llamativa disparidad entre la perspectiva que ofrecen las instituciones públicas internacionales, que hablan de una crisis más profunda y más prolongada, y lo que se interpreta por parte de algunas instituciones privadas que indican que, en algunos casos, la crisis ha sido ya descontada, y que se puede ver la luz al final del túnel al final del presente año", apuntó.

En este sentido, insistió en que se trata de "una disparidad llamativa, porque normalmente las instituciones públicas suelen ser las menos negativas y, en este caso, son las más pesimistas".

Asimismo, Pallardó destacó que "las turbulencias financieras internacionales se han agravado" desde la última reunión del OCEI, "sobre todo, en marzo cuando hubo episodios realmente preocupantes", apuntó. Como consecuencia de ello, aseguró que "cabe esperar que la fuerte desaceleración que ya estaba prevista en todos los países desarrollados se pueda acentuar algo más".