BRAZZAVILLE.- Veintiséis años después del 'boom' petrolero de 1982, Congo, donde el 70% de la población vive por debajo del umbral de la pobreza, espera un segundo auge del oro negro gracias a nuevos descubrimientos y exploraciones en sus aguas territoriales."Es una nueva era. Un nuevo vuelo del sector petrolero en el Congo", subrayó el ministro congoleño de Hidrocarburos, Jean Baptiste Tati Lutard.
La compañía francesa Total y la italiana Eni, los dos mayores operadores por este orden en Congo, han realizado grandes inversiones estos últimos años y prevén aumentar considerablemente su producción.
Total inauguró el 22 de mayo en Pointe Noire (sur) una plataforma sobre el yacimiento de Moho Bilondo, del cual posee la concesión hace tres años. La compañía estima en un billón de francos CFA (1.500 millones de euros) el costo de las inversiones para explotar este campo, cuyas reservas probadas son estimadas en unos 230 millones de barriles.
Moho Bilondo es el primer campo de 'offshore' profundo congoleño que entra en fase de producción. Su primer pozo se activó a mediados de abril y el segundo será activado en junio.
Con Moho-Bilondo, la producción congoleña de Total alcanzará unos 190.000 barriles/día en 2008 y aumentará en un 35% la producción del país, estimada en 256.000 b/d. En 2004, Total aseguró un 62% de la producción de Congo.
"Por su dimensión y su impacto en la economía, este proyecto representa una etapa esencial y determinante en el desarrollo de Congo gracias a las riquezas que va a crear, al ofrecer nuevas posibilidades de inversión", indicó el director general de Total Congo, Guy Maurice.
Eni contempla por su lado aumentar en un 30% de aquí al 2012 su producción diaria, que se acerca actualmente a los 85.000 b/d.
La empresa italiana explotará arenas bituminosas en las zonas de Chikatanga y Chikatanga-Makola, a 70 kilómetros de Pointe Noire.
"Estos yacimientos permitirán producir bitumen o alquitrán para evitar que Congo los importe", explicó a AFP Anaclet Mvila, responsable de márketing de Eni Congo. Congo cuenta con menos de 2.000 kilómetros de rutas asfaltadas.
Según los estudios de Eni, estos yacimientos bituminosos albergan reservas importantes. La producción comenzará en 2011 y alcanzará los 40.000 barriles por día en 2014, según Eni.
Las perspectivas del sector manejado en un 80% por compañías extranjeras son buenas, según el gobierno: el sector petrolero es objeto de 18 permisos de investigación y de 20 de explotación.
Por su lado, el sector del gas es estimado en 120.000 millones de m3 de reservas, de las cuales un 55% de gas asociado y 45% de gas natural.
La producción de oro negro en Congo no siempre se traduce en una mejor calidad de vida para la población.
"Producimos más petróleo, el precio del barril aumenta, pero Congo se hunde en la pobreza. Nuestros salarios están congelados desde 1994", señaló Edmond Mpaka, profesor en el sector privado en Brazzaville.
El petróleo representa más de 70% de los ingresos del Estado, cuyo presupuesto 2008 se acerca a los 2 billones de francos CFA (3.000 millones de euros).
A pesar de ello, un 70% de los congoleños viven por debajo del umbral de pobreza. Apenas un 5% de los pobres que viven en zonas rurales tienen acceso a la electricidad, contra menos de 45% en la ciudad. Según un estudio de 2007, la pobreza en el área de la vivienda afecta en promedio a un 58% de la población.
"Espero que el boom petrolero sea duradero para estimular el crecimiento económico de Congo", afirmó Fidèle Dimun, prefecto de Kuilu, la región de Pointe Noire. "Así podremos luchar contra la pobreza", añadió.
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