Solbes admite que la UE sólo puede dar recomendaciones sobre el sueldo de los directivos

BRUSELAS.- El vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, admitió hoy que la Unión Europea sólo puede dar recomendaciones sobre el sueldo de los directivos y descartó cualquier tipo de medida legislativa alegando que estas decisiones se toman "en el ámbito de la empresa".

Solbes hizo estas declaraciones a la entrada de la reunión mensual de ministros de Economía de la eurozona, que tienen previsto discutir esta tarde sobre la cuestión de los sueldos de los directivos.

El primer ministro luxemburgués y presidente de turno del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, ha arremetido en diversas ocasiones contra las remuneraciones "sin límite" de los altos ejecutivos empresariales, que contrastan con la exigencia de "moderación salarial" que se dirige a los trabajadores.

"Podemos llamar la atención sobre el tema, podemos hacer referencia a que deben aplicarse buenas prácticas, podemos insistir en que el comportamiento del gobierno corporativo sea prudente, pero es cierto que son decisiones que se toman en el ámbito de las empresas", explicó Solbes.

"Nos pasa también con otros sueldos y salarios. Que también podemos dar recomendaciones para que vayan en la buena dirección, pero al final están en el ámbito de la empresa", resaltó.

El vicepresidente económico descartó asimismo dar un tratamiento "fiscal" diferenciado a los sueldos de los directivos. "Ya existe una política fiscal específica en la que los ingresos mayores tienen una progresividad mayor. Pero dar un tratamiento diferenciado por el hecho de que sean sueldos u otro tipo de cosas es difícil de hacer", constató.

Por otra parte, Solbes, dijo este martes que los actuales niveles de inflación harían difícil que el Banco Central Europeo baje los tipos de interés por el momento.

"Mientras no bajen los precios es lógico, es comprensible, que el banco central sea prudente", dijo en una entrevista en Antena 3 Televisión.

Sin embargo, añadió que podría ser más fácil para el banco central encarar un descenso de los tipos a finales del año, cuando supuestamente la inflación haya cedido.

"Yo siempre pensé que a fin de año nosotros deberíamos estar en precios próximos al tres por ciento y que Europa estaría con precios próximos al dos por ciento. A partir de ese momento será mucho más fácil que se plantee este tipo de debate", agregó.