miércoles, 11 de junio de 2008

El presidente de México busca en España inversiones españolas para su sector petrolero

MADRID.- El presidente de México, Felipe Calderón, inicia este miércoles una visita de Estado de tres días a España, la primera que realiza un mandatario extranjero esta legislatura, para tratar de captar inversiones, sobre todo en los sectores de hidrocarburos e infraestructuras.

México está inmerso en un debate nacional sobre la conveniencia de abrir su insolvente parcela petrolífera a las empresas extranjeras para intentar reflotar el sector, y en un gigantesco Plan de Infraestructuras 2007-2012 con el que el Gobierno quiere invertir más de 160.000 millones de euros en modernizar carreteras, puertos y aeropuertos del país.

Esos son, según fuentes diplomáticas, los principales polos de atracción de inversiones que el mandatario mexicano, que llegará a Madrid acompañado por su esposa y sus ministros de Exteriores, Economía y Turismo, pondrá sobre la mesa en sus reuniones con el Gobierno y empresarios españoles.

Calderón tiene previstos encuentros con directivos de la petrolera Repsol, empresa clave con vistas a captar inversiones en el sector de la energía, Telefónica, La Caixa y el Banco de Sabadell, entre otras grandes compañías.

Antes de viajar a España, Calderón señaló en México que España constituye un "aliado natural" en su estrategia de aproximarse a Europa y reducir su actual dependencia del vecino Estados Unidos.

«Promoveremos toda la inversión posible», aseguró el lunes pasado el mandatario latinoamericano, que recibirá a los empresarios españoles en Madrid mañana jueves, el mismo día que se reunirá en La Moncloa con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el sábado en Barcelona.

Los Reyes recibirán en el Palacio de El Pardo al mandatario mexicano y su esposa, Margarita Zavala, con quienes almorzarán después en La Zarzuela. Don Juan Carlos y Calderón volverán a verse por la noche en el Palacio Real, donde el monarca le ofrecerá una cena en honor.

En el plano bilateral, los dos países firmarán un memorando en materia de inmigración que permitirá la contratación en origen de mano de obra cualificada mexicana por parte las empresas españolas o mexicanas

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