PARÍS.- La mayoría de los países que integran la OCDE tienen por delante "varios trimestres de débil crecimiento" y elevada inflación, estimó este miércoles la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), que rebajó sus pronósticos para muchas naciones.
"Varios trimestres de débil crecimiento aguardan a la mayoría de las economías de la OCDE", sobre todo a raíz de la crisis inmobiliaria, la disparada del precio de las materias primas y la inestabilidad de los mercados financieros, sostuvo el informe de perspectivas semestrales de la Organización.
En Estados Unidos, el país más afectado por la crisis desatada por los préstamos hipotecarios de riesgo ('subprime'), la OCDE revisó a la baja su previsión de crecimiento en 2008 al 1,2% del PIB, contra el 1,4% en sus previsiones interinas de marzo y el 2% en sus previsiones de hace seis meses. Para 2009, la OCDE espera un crecimiento del 1,1% de la primera economía mundial, la mitad que hace seis meses.
"La actividad estadounidense será básicamente plana en 2008 y remontará cuando finalice la corrección del mercado inmobiliario, se normalicen las condiciones de crédito y se hagan sentir los efectos de la flexibilización monetaria", anticipó la OCDE, que no descarta un crecimiento "negativo en el segundo trimestre".
En la Eurozona, la previsión fue recortada al 1,7% para 2008, contra el 1,9% en marzo pasado, y a 1,4% en 2009, contra el 2% de las previsiones de diciembre. "La actividad de la Eurozona es moderada este año a raíz de un crédito más ajustado, menores ingresos reales y exportaciones y pérdidas de participación de mercado", apuntó la OCDE. El consumo ha decaído, la inflación es elevada y "cada vez hay más señales de que la apreciación del euro (10% en términos reales desde inicios de 2006) hunde las exportaciones", añadió.
En el caso de Japón, segunda economía mundial, la OCDE elevó al 1,7% su proyección de crecimiento en 2008 frente a un 1,5% en su anterior previsión, pero rebajó su pronóstico para el año próximo al 1,5%, contra un 1,8% hace seis meses.
"Las economías de la OCDE han sido sacudidas por fuertes vientos en el pasado reciente y recuperar el rumbo requerirá tiempo y políticas adecuadas", apunta el informe.
España, uno de los países más afectados por la burbuja inmobiliaria, así como Gran Bretaña, donde los gastos de los hogares son afectados por la crisis de los mercados hipotecarios, e Italia, cuya economía está muy debilitada, son particularmente vulnerables a la desaceleración de la economía mundial.
La economía española crecerá apenas un 1,6% este año y un 1,1% en 2009 a raíz de la crisis inmobiliaria, que afectará la demanda doméstica, estimó la OCDE. Hace seis meses, mucho más optimista, aguardaba un crecimiento de la economía española del 2,5% en 2008 y del 2,4% en 2009.
Los países cuya economía depende en gran parte de Estados Unidos, como México y Canadá, también se ven fuertemente afectados. La economía de México se desacelerará más de lo previsto en 2008 y crecerá sólo un 2,8% debido a la caída de la demanda externa generada por la crisis en Estados Unidos, pero remontará un poco en 2009, cuando crecerá un 3,3%, pronosticó la OCDE.
La inflación sigue siendo uno de los grandes peligros que acecha a la economía mundial. La OCDE espera que los precios del petróleo permanezcan elevados a raíz del vigor de la demanda de los países emergentes y "quizás también de elementos especulativos".
Para el resto de las materias primas, la OCDE pronostica un repliegue pero los precios se mantendrían por encima de sus promedios históricos.
Globalmente el crecimiento económico de los gigantes emergentes (India, China, Rusia) seguiría siendo robusto, estimó.
Según la OCDE, la economía brasileña crecerá un 4,8% en 2008 y un 4,5% en 2009, estimulada por una fuerte demanda doméstica y la explosión de las inversiones, en tanto que sus mercados financieros están capeando "bastante bien" la tormenta mundial.
"Varios trimestres de débil crecimiento aguardan a la mayoría de las economías de la OCDE", sobre todo a raíz de la crisis inmobiliaria, la disparada del precio de las materias primas y la inestabilidad de los mercados financieros, sostuvo el informe de perspectivas semestrales de la Organización.
En Estados Unidos, el país más afectado por la crisis desatada por los préstamos hipotecarios de riesgo ('subprime'), la OCDE revisó a la baja su previsión de crecimiento en 2008 al 1,2% del PIB, contra el 1,4% en sus previsiones interinas de marzo y el 2% en sus previsiones de hace seis meses. Para 2009, la OCDE espera un crecimiento del 1,1% de la primera economía mundial, la mitad que hace seis meses.
"La actividad estadounidense será básicamente plana en 2008 y remontará cuando finalice la corrección del mercado inmobiliario, se normalicen las condiciones de crédito y se hagan sentir los efectos de la flexibilización monetaria", anticipó la OCDE, que no descarta un crecimiento "negativo en el segundo trimestre".
En la Eurozona, la previsión fue recortada al 1,7% para 2008, contra el 1,9% en marzo pasado, y a 1,4% en 2009, contra el 2% de las previsiones de diciembre. "La actividad de la Eurozona es moderada este año a raíz de un crédito más ajustado, menores ingresos reales y exportaciones y pérdidas de participación de mercado", apuntó la OCDE. El consumo ha decaído, la inflación es elevada y "cada vez hay más señales de que la apreciación del euro (10% en términos reales desde inicios de 2006) hunde las exportaciones", añadió.
En el caso de Japón, segunda economía mundial, la OCDE elevó al 1,7% su proyección de crecimiento en 2008 frente a un 1,5% en su anterior previsión, pero rebajó su pronóstico para el año próximo al 1,5%, contra un 1,8% hace seis meses.
"Las economías de la OCDE han sido sacudidas por fuertes vientos en el pasado reciente y recuperar el rumbo requerirá tiempo y políticas adecuadas", apunta el informe.
España, uno de los países más afectados por la burbuja inmobiliaria, así como Gran Bretaña, donde los gastos de los hogares son afectados por la crisis de los mercados hipotecarios, e Italia, cuya economía está muy debilitada, son particularmente vulnerables a la desaceleración de la economía mundial.
La economía española crecerá apenas un 1,6% este año y un 1,1% en 2009 a raíz de la crisis inmobiliaria, que afectará la demanda doméstica, estimó la OCDE. Hace seis meses, mucho más optimista, aguardaba un crecimiento de la economía española del 2,5% en 2008 y del 2,4% en 2009.
Los países cuya economía depende en gran parte de Estados Unidos, como México y Canadá, también se ven fuertemente afectados. La economía de México se desacelerará más de lo previsto en 2008 y crecerá sólo un 2,8% debido a la caída de la demanda externa generada por la crisis en Estados Unidos, pero remontará un poco en 2009, cuando crecerá un 3,3%, pronosticó la OCDE.
La inflación sigue siendo uno de los grandes peligros que acecha a la economía mundial. La OCDE espera que los precios del petróleo permanezcan elevados a raíz del vigor de la demanda de los países emergentes y "quizás también de elementos especulativos".
Para el resto de las materias primas, la OCDE pronostica un repliegue pero los precios se mantendrían por encima de sus promedios históricos.
Globalmente el crecimiento económico de los gigantes emergentes (India, China, Rusia) seguiría siendo robusto, estimó.
Según la OCDE, la economía brasileña crecerá un 4,8% en 2008 y un 4,5% en 2009, estimulada por una fuerte demanda doméstica y la explosión de las inversiones, en tanto que sus mercados financieros están capeando "bastante bien" la tormenta mundial.
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