En Buenos Aires, donde está de visita, el presidente Chávez anunció en una rueda de prensa que suspendió su viaje a Tarija. Los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y Argentina, Cristina Kirchner, suspendieron este martes su viaje a Tarija, donde debían reunirse con su par boliviano, Evo Morales.
El viaje de Kirchner se suspendió a petición de Evo Morales por cuestiones de seguridad, dijo una fuente del ministerio de Exteriores argentino.
"Hemos decidido suspender el viaje a Tarija porque hubo agresiones contra periodistas, contra las delegaciones (anticipadas) de Argentina y Venezuela, con un fascismo de las peores épocas", dijo Chávez quien aseguró haber tomado la decisión tras comunicarse por teléfono con Morales.
Chávez acusó a Estados Unidos de presuntos actos de desestabilización en Bolivia previos al referéndum revocatorio de autoridades del domingo próximo.
"Acusamos directamente al imperio de Estados Unidos que hace todo lo posible para evitar nuestra unión", dijo Chávez y atribuyó los presuntos actos "al desespero imperial de Mister Danger", como suele referirse al presidente de Estados Unidos, George Bush.
El presidente venezolano insistió en que "esto nos indica que el imperio americano no puede ser desestimado".
Chávez y Kirchner tenían previsto viajar desde Buenos Aires a Tarija, para participar de la apertura de pliegos de una planta procesadora de gas, apoyada por las empresas estatales de energía Enarsa de Argentina, y PDVSA de Venezuela.
Argentina "apoya la institucionalidad de Bolivia y al gobierno constitucional de Evo Morales, y el avance en el proyecto de transformación de Bolivia, en el que nos sentimos muy comprometidos", dijo Taiana a la prensa, cuando aún no se había suspendido el viaje.
Reynaldo Bayard, líder civil de Tarija, la región más rica en gas de Bolivia, rechazó la visita de los presidentes de Venezuela y Argentina, a quienes acusó de "hacer campaña proselitista" a favor del presidente Evo Morales antes del referéndum.
El líder cívico opositor de Tarija, Reynaldo Bayard declaró a la emisora Erbol que la policía dispersó con gases lacrimógenos a un grupo de manifestantes que llegó al aeropuerto local para impedir la reunión de los mandatarios.
"Dicen que van a firmar un acuerdo energético pero es un show político en favor de Morales", dijo Bayard.
Tarija, a 660 kilómetros al sur de La Paz es uno de los reductos de la oposición.
Un minero murió en un choque con la policía temprano este martes cuando fuerzas del orden en otra zona del país, a 190 kilómetros al sur de La Paz, despejaron una ruta que había sido tomada por los sindicalistas que reclaman al gobierno una reforma en el sistema de jubilaciones. Otras doce personas resultaron heridas.
Radio Erbol dijo que una segunda persona herida falleció en un hospital, pero las autoridades no confirmaron el deceso.
Los incidentes complicaron más el tenso clima social y político que vive el país previo al referendo del domingo en el cual Morales, su vicepresidente Alvaro García y ocho prefectos (gobernadores), seis de ellos opositores, someterán la continuidad en sus cargos al voto.
También el martes, estudiantes y padres de familia se enfrentaron a maestros de escuelas públicas que habían cortado otra ruta en el centro del país en demanda de la reforma jubilatoria.
En tanto, en Santa Cruz y Beni, líderes regionales opositores iniciaron el domingo en la noche una huelga de hambre para exigir la devolución de unos fondos que el gobierno confiscó para pagar un bono a los ancianos.
El ministro de Gobierno, Alfredo Rada, calificó de políticas esas protestas.
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