miércoles, 6 de agosto de 2008

España se sitúa a la cabeza de la caída de las ventas y el descenso de la actividad en la UE

BRUSELAS.- España figura en posiciones de cabeza en la mayor parte de los malos indicadores económicos. En nuestro país, las ventas minoristas se desplomaron en junio, la facturación de las grandes empresas nacionales intensifica su ritmo de descenso y los índices de producción y actividad que elaboran instituciones privadas ponen el acento en que la contracción ya afecta a la industria manufacturera y también a los servicios.

El pasado junio, las ventas minoristas cayeron en España el 7,7% respecto al mismo periodo del año anterior, según datos publicados ayer por la Oficina Estadística Europea. Entre los 27 socios de la UE, sólo Letonia, con un descenso del 8,3%, presentó un resultado peor y el promedio de todos los países arrojó una más moderada caída del 1,1%.

Por su parte, el informe que sobre ventas, empleo y salarios en las grandes empresas elabora la Agencia Tributaria precisa que, en junio, las ventas totales de estas sociedades cayeron el 8,7% con respecto al mismo mes del año precedente. Con este dato, el segundo trimestre se cierra con un descenso del 4,9%, y la primera mitad del año arroja una merma del 3,4% respecto al primer semestre de 2007.

La disminución de las ventas de las grandes empresas se aprecia especialmente en las destinadas al interior, aunque con el paso de los meses, también las exportaciones se han ido debilitando. En las ventas interiores, al deterioro del consumo de bienes duraderos hay que añadir los menores desembolsos en automóviles y carburantes, y en alimentación.

Finalmente, la información avanzada que sobre el sector servicios en España difundió ayer la sociedad de análisis Markit Economics pone de manifiesto que, durante el mes de julio, la actividad comercial cayó con intensidad, a la vez que se redujo de forma drástica la entrada de nuevos pedidos.

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