MADRID.- El Real Madrid es el equipo de fútbol que este año menos se ha gastado en fichajes. El Fútbol Club Barcelona se ha gastado más de 70 millones de euros en nuevas caras, según TVE.
Atrás han quedado ya los ilustres 'galácticos' de la era Florentino por los que se desembolsaban anualmente una millonada de euros. Incluso llegando a batir un récord en el mercado del balón con los 76 millones de euros que el Madrid pagó a la Juve para hacerse con los servicios de una de las últimas leyendas vivas que ha dado el fútbol: el 'mago' Zidane.
Esta temporada toca cuchara de palo y sopa de pan, que la cosa no está para derrochar. Esto debe pensar Calderón para mentalizarse y asumir las múltiples negativas de fichajes frustrados que ha ido sufriendo a lo largo del verano. Esto empieza a parecerse a 'Halloween' con tanta calabaza. Primero la historia interminable de Cristiano Ronaldo -ahora me voy, ahora me quedo-, luego la emancipación de un 'hijo' brasileño que quería hacerse mayor renegando de su 'padre' alemán.
Entre tanto lío sonaron nombres y más nombres, hasta llegar a las propuestas de compromiso serio con Cazorla, algo que sólo sirvió para hinchar el sueldo del internacional en el Villarreal. La cosa siguió por el mediterráneo, esta vez era Villa el objetivo, pero más de lo mismo y el 'guaje' se quedó en Mestalla, pensaría que nada como la paella valenciana.
Ayer se cerró el mercado de fichajes a las 12 de la noche y Robinho por fin conseguía su propósito de ir a la Premier y abandonar la 'casa merengue', pero el equipo no era el esperado, ya que a última hora el Manchester City hizo una oferta irrechazable por el brasileño, 40 millones de euros, más dos en incentivos.
Al final de la temporada pasada, el Real Madrid olía a equipo grande, a grupo unido al que sólo le hacían falta pequeños retoques para conquistar fueros más grandes, pero la temporada ya ha empezado, -con derrota- y la plantilla lejos de ser más fuerte, ha perdido a Baptista (vendido a la Roma) y al ya mencionado 'hijo rebelde'.
Por el contrario, los refuerzos madridistas son dos jugadores repescados, De la Red y Javi García y el único fichaje que ha dicho el 'si quiero' a Calderón, el holandés Rafael Van der Vart. En caso contrario al Madrid se encuentra el Barcelona, que por cambiar ha cambiado hasta el entrenador, Pep Guardiola.
Tras dos temporadas en blanco y entre moción y moción, Laporta se echó al ataque para fichar a Alves (el fichaje más caro del verano español con 30 millones de euros), Martín Cáceres, Piqué, Enrique, Hlebs y Keita. En total ha sido el equipo más derrochador de la Liga con un desembolso de alrededor de 73 millones de euros.
Pero para acontecer estos fichajes, Laporta tuvo que desprenderse de sus estrellas, Deco (Chelsea), Ronaldinho ( Milan) y Eto'o que a última hora fue indultado por Pep. Los dos equipos punteros españoles, el Real Madrid y el Barcelona, andan en sitios opuestos.
Mientras el Madrid es el equipo que menos ha fichado de la Liga, el Barça es el equipo que más ha invertido en nuevos jugadores, aunque los resultados de unos y de otros hasta el momento es el mismo, ambos han empezado con derrota el la Liga.
Otro club español llamado a hacer algo grande esta temporada, el Atlético de Madrid, tampoco ha gastado mucho, pero lo ha hecho bien, apuntalando al equipo atrás con los fichajes de Ujfalusi y Heitinga, el medio con Assunçao y la delantera con Pongolle, sin olvidar al recuperado Maniche y la cesión de Banegas, procedente del Valencia.
El Sevilla sigue con su política, hasta el momento resultona, de comprar barato y vender caro, y eso es lo que se ha dedicado a hacer Delnido por consego de Monchi con los Romaric y compañía. El Villarreal también se ha reforzado para pasar sin discreción por la Champions, y entre lo mejor de este verano resaltan los fichajes de Ibagaza, Llorente y por supuesto la renovación de Cazorla.
El Valencia con un verano convulso, a causa de un ex presidente delirante, no está precisamente para derrochar demasiado y lo más destacable son Emery, el nuevo técnico que intentará sacar al equipo ché de los resultados negativos de la temporada pasada, y la renovación de Silva.
La liga europea que más ha desembolsado este verano ha sido la Premier, como no podía ser de otra manera, los clubes ingleses están en manos de grandes grupos inversores que tienen el dinero por penitencia. Los bombazos más destacables de la Premier son los dos fichajes de última hora de Bervatov y Robinho, uno al Manchester United, y el otro al City.
Los dos fichajes han costado un total de 95 millones de euros, 'casi na'. Otro fichaje que no ha salido barato precisamente, fue la contratación de Robbe Keane por el Liverpool, que se gastó 30 millones de nada, más la incorporación de Riera, otro español al saco de Benitez. Xisco completa la salida masiva de españoles a la Premier, después de fichar por el Newcastle Y el Totenham de Juande a recaudar 85 millones de euros por vender a dos de sus estrellas, Keane y Berbatov.
Pero no se queda en cuadros, ha traído a Pavlichenko para suplir las bajas de sus delanteros. El mercado inglés es el mejor reforzado y eso se nota en el campo, parece que si todo sigue igual, la Champions, salvo sorpresa, parece cosa de ingleses. El año pasado ya se vio la superioridad de la Premier, colocando a dos de sus equipos en la final del máximo trofeo europeo de clubes.
Esta temporada toca cuchara de palo y sopa de pan, que la cosa no está para derrochar. Esto debe pensar Calderón para mentalizarse y asumir las múltiples negativas de fichajes frustrados que ha ido sufriendo a lo largo del verano. Esto empieza a parecerse a 'Halloween' con tanta calabaza. Primero la historia interminable de Cristiano Ronaldo -ahora me voy, ahora me quedo-, luego la emancipación de un 'hijo' brasileño que quería hacerse mayor renegando de su 'padre' alemán.
Entre tanto lío sonaron nombres y más nombres, hasta llegar a las propuestas de compromiso serio con Cazorla, algo que sólo sirvió para hinchar el sueldo del internacional en el Villarreal. La cosa siguió por el mediterráneo, esta vez era Villa el objetivo, pero más de lo mismo y el 'guaje' se quedó en Mestalla, pensaría que nada como la paella valenciana.
Ayer se cerró el mercado de fichajes a las 12 de la noche y Robinho por fin conseguía su propósito de ir a la Premier y abandonar la 'casa merengue', pero el equipo no era el esperado, ya que a última hora el Manchester City hizo una oferta irrechazable por el brasileño, 40 millones de euros, más dos en incentivos.
Al final de la temporada pasada, el Real Madrid olía a equipo grande, a grupo unido al que sólo le hacían falta pequeños retoques para conquistar fueros más grandes, pero la temporada ya ha empezado, -con derrota- y la plantilla lejos de ser más fuerte, ha perdido a Baptista (vendido a la Roma) y al ya mencionado 'hijo rebelde'.
Por el contrario, los refuerzos madridistas son dos jugadores repescados, De la Red y Javi García y el único fichaje que ha dicho el 'si quiero' a Calderón, el holandés Rafael Van der Vart. En caso contrario al Madrid se encuentra el Barcelona, que por cambiar ha cambiado hasta el entrenador, Pep Guardiola.
Tras dos temporadas en blanco y entre moción y moción, Laporta se echó al ataque para fichar a Alves (el fichaje más caro del verano español con 30 millones de euros), Martín Cáceres, Piqué, Enrique, Hlebs y Keita. En total ha sido el equipo más derrochador de la Liga con un desembolso de alrededor de 73 millones de euros.
Pero para acontecer estos fichajes, Laporta tuvo que desprenderse de sus estrellas, Deco (Chelsea), Ronaldinho ( Milan) y Eto'o que a última hora fue indultado por Pep. Los dos equipos punteros españoles, el Real Madrid y el Barcelona, andan en sitios opuestos.
Mientras el Madrid es el equipo que menos ha fichado de la Liga, el Barça es el equipo que más ha invertido en nuevos jugadores, aunque los resultados de unos y de otros hasta el momento es el mismo, ambos han empezado con derrota el la Liga.
Otro club español llamado a hacer algo grande esta temporada, el Atlético de Madrid, tampoco ha gastado mucho, pero lo ha hecho bien, apuntalando al equipo atrás con los fichajes de Ujfalusi y Heitinga, el medio con Assunçao y la delantera con Pongolle, sin olvidar al recuperado Maniche y la cesión de Banegas, procedente del Valencia.
El Sevilla sigue con su política, hasta el momento resultona, de comprar barato y vender caro, y eso es lo que se ha dedicado a hacer Delnido por consego de Monchi con los Romaric y compañía. El Villarreal también se ha reforzado para pasar sin discreción por la Champions, y entre lo mejor de este verano resaltan los fichajes de Ibagaza, Llorente y por supuesto la renovación de Cazorla.
El Valencia con un verano convulso, a causa de un ex presidente delirante, no está precisamente para derrochar demasiado y lo más destacable son Emery, el nuevo técnico que intentará sacar al equipo ché de los resultados negativos de la temporada pasada, y la renovación de Silva.
La liga europea que más ha desembolsado este verano ha sido la Premier, como no podía ser de otra manera, los clubes ingleses están en manos de grandes grupos inversores que tienen el dinero por penitencia. Los bombazos más destacables de la Premier son los dos fichajes de última hora de Bervatov y Robinho, uno al Manchester United, y el otro al City.
Los dos fichajes han costado un total de 95 millones de euros, 'casi na'. Otro fichaje que no ha salido barato precisamente, fue la contratación de Robbe Keane por el Liverpool, que se gastó 30 millones de nada, más la incorporación de Riera, otro español al saco de Benitez. Xisco completa la salida masiva de españoles a la Premier, después de fichar por el Newcastle Y el Totenham de Juande a recaudar 85 millones de euros por vender a dos de sus estrellas, Keane y Berbatov.
Pero no se queda en cuadros, ha traído a Pavlichenko para suplir las bajas de sus delanteros. El mercado inglés es el mejor reforzado y eso se nota en el campo, parece que si todo sigue igual, la Champions, salvo sorpresa, parece cosa de ingleses. El año pasado ya se vio la superioridad de la Premier, colocando a dos de sus equipos en la final del máximo trofeo europeo de clubes.
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