La mayoría de los índices asiáticos cayeron fuertemente el martes -la bolsa de Tokio se hundió a su menor nivel en tres años- luego de un derrumbe récord el lunes en Wall Street tras el fracaso del rescate financiero de 700.000 millones de dólares impulsado por el gobierno estadounidense.
"No estamos teniendo las enormes pérdidas que fueron anticipadas" en Europa, dijo Tom Hougaard, de City Index en Londres. "Esto otorga confianza y ha conducido a (...) la búsqueda de algunas gangas" en las bolsas, estimó.
La sorpresiva derrota del plan de rescate en la Cámara de Representantes estadounidense despertó el temor de una profundización de la tormenta financiera, que ya ha sacudido a los mercados mundiales e hizo colapsar a algunos de los mayores bancos del mundo.
El índice Dow Jones se hundió 777,68 puntos (-6,98%) y cerró en 10.365,45 puntos, su mayor declive en puntos en un día de toda su historia. La caída fue mayor que los 684 puntos perdidos el 17 de septiembre de 2001, cuando los mercados reabrieron tras los ataques terroristas del 11 de septiembre.
En América Latina, el derrumbe de las bolsas también fue histórico. La bolsa de Sao Paulo, el mayor mercado bursátil de la región, paró automáticamente sus operaciones por media hora luego de que su principal indicador, el Ibovespa, perdiera más de 10%. Cerró con una caída de 9,36%, mientras el Merval de Buenos Aires perdió 8,68% y la bolsa de México un 6,4%.
"El fracaso del Congreso en aprobar el plan de Paulson (secretario del Tesoro norteamericano) el lunes no estaba en el guión. Como hemos visto, los mercados, sobre todo los títulos, no se lo han tomado demasiado bien", dijo Gerard Lyons, economista jefe de Standard Chartered.
Tokio cerró con una fuerte caída de 4,1% el martes, Sídney cayó un 4,3% y Taipei perdió un 3,55%. Hong Kong cerró en alza de 0,8% tras haber perdido hasta más de 6% durante la sesión.
En Europa, Londres evolucionaba en alza de 0,22% a fines de la mañana, tras caer un 3% poco después de la apertura. París ganaba un 0,21% mientras Fráncfort perdía un 0,75%. La onda expansiva de la crisis financiera se hacía sentir por todos los rincones del planeta.
El banco franco-belga Dexia se convirtió en la última institución financiera en ser rescatada. Los gobiernos de Francia, Bélgica y Luxemburgo inyectaron 6.400 millones de euros en Dexia, cuyas acciones se hundieron un 29% el lunes. Las acciones de Dexia han perdido un 51% de su valor desde el comienzo del año, pero el martes subían un 19,94% a 8,48 euros.
El euro se halla bajo presión tras el rescate de varios bancos europeos, que profundizó los temores sobre el sector bancario en el Viejo Continente. La moneda europea caía a 1,4376 dólares el martes en Londres, contra 1,4432 dólares en Nueva York al finalizar el lunes.
Los precios del petróleo subían debido a una búsqueda de oportunidades tras caer un 10% el lunes tras la derrota del plan de Paulson.
El barril de West Texas Intermediate (WTI) para entrega en noviembre, el crudo de referencia cotizado en Nueva York, subía 1,18 dólares a 97,51 dólares en los intercambios electrónicos. El barril de Brent del mar del Norte para entrega en noviembre trepaba en Londres 1,37 dólares a 95,39 dólares.
En Asia los mercados tuvieron una jornada dolorosa, mientras los inversores buscaban refugio en el oro y los bonos. "El mercado está explorando cuál es el piso", dijo Hiroichi Nishi, jefe de títulos de Nikko Cordial Securities en Tokio.
Todos están a la espera de saber si el Congreso votará o no el plan de rescate, o si la Casa Blanca propondrá nuevas medidas, indicó. Los mercados especulan asimismo con la posibilidad de que varios bancos centrales anuncien un recorte coordinado de las tasas de interés para impedir una escasez del crédito.
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