Los mercados seguirán con dudas por la crisis de las hipotecas en EEUU, según el BCRA

BUENOS AIRES.- El presidente del Banco Central argentino (BCRA) defendió el lunes la política de acumulación de reservas para hacer frente a las crisis financieras pero advirtió que hasta que la crisis hipotecaria en Estados Unidos no llegue a su "piso" continuará la volatilidad en los mercados internacionales.

"La estrategia desarrollada de formación de colchones de liquidez en tiempos de bonanza nos permite capear los temporales de manera inédita para nuestra historia tanto por cuestiones exógenas como endógenas", dijo Martín Redrado en un seminario organizado por el BCRA del que participan banqueros y economistas de todo el mundo.

Según el último informe del BCRA del 22 de agosto, las reservas internacionales alcanzan 47.204 millones de dólares.

Redrado también destacó la política financiera argentina sostenida en tres ejes: "una política monetaria robusta que garantiza el equilibrio entre oferta y demanda de dinero, un esquema anticíclico de acumulación de reservas... y un régimen de tipo de cambio flotante administrado", que desde junio se mantiene en torno de los 3,08-3,05 pesos por dólar.

Sin embargo, el banquero advirtió que "hasta que el mercado inmobiliario no llegue a un piso, no veremos una reducción de la volatilidad de los mercados financieros".

"No es realista pensar que podemos desacoplarnos si continúa el deterioro de la situación internacional", añadió.

La semana pasada Redrado desestimó públicamente las dudas de los analistas sobre las abultadas necesidades financieras de Argentina, a las que calificó de "infundadas", al sostener que el país triplica actualmente el nivel de superávit primario necesario para mantener constante la relación entre la deuda y el Producto Bruto Interno (PBI).

Tres semanas atrás el gobierno argentino anunció la recompra de títulos de deuda con vencimiento en 2008 y 2009 en un intento por frenar la creciente incertidumbre de los mercados sobre la solidez financiera del país.

Los activos argentinos se habían desplomado a inicios de agosto luego de la venta directa a Venezuela de un bono en dólares con vencimiento en 2015 a una tasa del 15%, considerada por algunos analistas como de "incumplimiento".

Pese a crecer a tasas superiores al 8% anual en los últimos cinco años, desde 2005 Argentina no ha tomado créditos en los mercados internacionales ante el temor de que esos fondos sean embargados por los acreedores que no participaron del canje de deuda lanzado ese año, que reclaman judicialmente la devolución de sus ahorros.