Tanto los gobiernos como el sector privado "de América Latina tendrán que hacer frente a mercados mucho más duros y exigentes", señalan los empresarios en el documento cuyas conclusiones -tras dos días de encuentro- fueron entregadas al Secretario General de la Comunidad Iberoamericana, Enrique Iglesias, para que las hiciera llegar a los jefes de Estado y de Gobierno.
Las dificultades de financiación podrían afectar la construcción proyectos considerados como vitales para garantizar una efectiva integración de la región.
Entre ellos se encuentran los ejes viales transversales entre la Amazonia y el Pacífico (desde Brasil hasta Ecuador y Colombia) y el Atlántico-Pacífico (a través de Brasil, Paraguay, Argentina y Chile), así como la conclusión de varios proyectos de túneles en la cordillera de los Andes, entre ellos uno para uso ferroviario, de 23 km, entre Argentina y Chile.
También afectaría los proyectos para lograr una integración de las redes de transmisión eléctrica de Centro y Sudamérica, y en menor medida -gracias a la capacidad de financiación de Venezuela- los desarrollos de una red de gasoductos en Sudamérica.
El presidente mexicano, Felipe Calderón, durante su intervención este jueves en el plenario de la reunión de los mandatarios señaló la necesidad de buscar mecanismos para aumentar la inversión pública en los proyectos de infraestructura.
"La región requiere ser receptora de enormes flujos de inversión y ahorro externo, sin los cuales le será imposible financiar su desarrollo", dijo Calderón.
El mandatario mexicano consideró que los países deberán combinar la inversión pública en infraestructura, educación y salud con la inversión privada, que será la única capaz de "detonar el crecimiento", y ofrecer mayores oportunidades de empleo para los jóvenes del continente, cuyo futuro es el tema principal de la cumbre.
El presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Luis Alberto Moreno, señaló que se están estudiando diversas alternativas para evitar que la crisis afecte la financiación de los proyectos de infraestructura.
"Una de las ideas que estamos concretando es como atender estas necesidades, especialmente para los proyectos de infraestructura que son de largo aliento que puedan tener problemas de financiación", indicó.
Por su parte el presidente colombiano, Alvaro Uribe, aseveró que "esta crisis financiera internacional es producto del capital especulativo. No podemos permitir que los daños que ha hecho el capital especulativo se tengan que pagar con la disminución de la política social en países como Colombia, o con la desfinanciación de las obras públicas".
En el mismo sentido Waldo Jiménez, representante de la Asociación Nacional de la Empresa Privada de El Salvador, señaló que "los gobiernos nunca van a tener suficientes recursos para hacer las inversiones tanto en materia energética como en otras áreas".
Por ello propuso que se promuevan alianzas con el sector privado. "Esa es nuestra principal recomendación para los jefes de Estado", puntualizó.
El documento de los empresarios también pide a los gobiernos prepararse ante la posibilidad de que la crisis mundial golpee más fuerte a la región. "Nadie piensa en una recesión próxima, aunque hay que estar preparados para hacer frente a esta etapa", apunta el texto.
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