Los coches eran el principal lastre para el índice ante el recorte de más del 10 por ciento de Porsche por unos ingresos y ventas anuales que se estancaron. La empresa no quiso dar previsiones para el presente año.
Daimler cedía un 8,3 por ciento a pesar de negar que fuera a emitir una advertencia sobre sus resultados. Renault y Peugeot caían más del cuatro por ciento cada uno. El negocio en Fiat se vio interrumpido por una caída excesiva. Unicredit también fue suspendido y la pérdida indicativa era del ocho por ciento.
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