Es la primera vez que el Grupo de las Siete naciones más industrializadas (G7) consulta a economías emergentes como China, India, Brasil, México o Rusia a causa de una crisis disparada en un país rico, Estados Unidos.
El G20 se comprometió a utilizar todos los mecanismos a su disposición para contener la crisis, en línea con la estrategia anunciada el viernes por los países industrializados, al cabo de una semana de volatilidad extrema en los mercados mundiales.
Los miembros del G20 "se comprometen a utilizar todas las herramientas económicas y financieras para asegurar la estabilidad y buen funcionamiento de los mercados financieros", señalaron los 19 integrantes de la agrupación en un comunicado de prensa.
También acordaron que las medidas para combatir la crisis sean "comunicadas de manera que las acciones de un país no afecten a otros o a la estabilidad del sistema como un todo".
El G20 resolvió asimismo "trabajar en conjunto para mejorar la regulación, supervisión y el funcionamiento general de los mercados financieros mundiales".
Este grupo de países emergentes más el G7 (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Italia y Japón) fue especialmente convocado a Washington por su presidencia interina, Brasilia, con la inesperada participación del mandatario estadounidense en la reunión.
"El presidente dijo que estamos enfrentando una crisis que comenzó aquí en Estados Unidos, y está (localizada) en economías desarrolladas ahora, pero afectará a los países en desarrollo", dijo el portavoz de Bush Tony Fratto.
"Dijo que vendrá un tiempo en el cual necesitaremos reunirnos y hablar sobre lo que haremos para asegurarnos que esto no vuelva a ocurrir, pero por ahora nuestra atención debe centrarse en resolver la crisis", añadió.
En la reunión, Brasil planteó una reforma del G20 para convertirlo en una instancia capaz de responder rápidamente a crisis financieras internacionales, indicó el ministro brasileño de Hacienda, Guido Mantega, portavoz del encuentro. Brasil propone en particular la creación de una suerte de célula de gestión de crisis en la que participarían los ministros de Finanzas y presidentes de bancos centrales del G20.
En la reunión del G20 participaron los titulares del FMI, Dominique Strauss-Kahn, y del Banco Mundial (BM), Robert Zoellick. Por la tarde, Strauss-Kahn llamó a acciones coordinadas para controlar la crisis y sostuvo que un plan de acción acordado por el G7 el viernes, recibió el apoyo de los 185 países miembros de la institución.
El titular del FMI indicó que se necesitarán medidas adicionales "en los próximos meses" para restablecer la situación. El FMI señaló que "está listo para poner rápidamente recursos sustanciales para ayudar a los países miembros a cubrir sus necesidades financieras" y estimó que es "extremadamente importante" que los países ricos y emergentes cooperen.
El viernes, el G7 presentó un plan de acción "urgente y excepcional", que no anuncia medidas específicas sino principios de acción, en los que se compromete entre otros a "utilizar todas las herramientas disponibles para respaldar a instituciones financieras importantes para el sistema y prevenir su quiebra", y a dar "todos los pasos necesarios para descongelar los mercados de crédito y moneda".
En Europa, los jefes de Estado y de gobierno de los 15 países de la zona euro tratarán de acordar un plan de acción común ante el agravamiento de la crisis durante una cumbre este domingo en París.
La reunión del G20 tuvo lugar en el marco de las asambleas de otoño del FMI y el BM en Washington. El próximo encuentro regular del grupo está previsto para los días 8 y 9 de noviembre en Sao Paulo, Brasil.
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