miércoles, 1 de octubre de 2008

Rechazo al escrutinio estatal / Ricardo Kirschbaum *

Los mercados quieren imponer su ley. Esto es que el paquete de rescate de unos 700 mil millones -más de dos veces el PBI de la Argentina- no tuviera condicionamientos ni regulaciones, como lo habían acordado los demócratas y los republicanos en el Congreso de los EE.UU. Así, los mercados "votaron" contra este salvaltaje pero no contra otro paquete que tenga sintonía con el pensamiento más crudo y pragmático de Wall Street.

Si se analiza esto con esa perspectiva, el voto en la Cámara de Representantes fue en respaldo del paquete originario, tal como George W. Bush y Henry Paulson, secretario del Tesoro, lo habían enviado al Congreso. Es decir, dándole a Paulson "superpoderes" inmensos para atender las necesidades de los bancos en crisis.

Los mercados quieren arrancarle al Congreso -con las bancadas de ambos partidos divididas ante el salvataje- una aprobación a "paquete cerrado". Es una ironía, hay que recordarlo, que Wall Street exija a los legisladores que actúen como una "escribanía" de la Casa Blanca.

El poder de los mercados, la especulación de cara a las elecciones presidenciales de noviembre y, sobre todo, la pérdida fenomenal de liderazgo de Bush hicieron el resto y provocaron este derrumbe a plomo en las economías de todo el mundo.

¿Es preferible un plan de salvaltaje con reparos a no tener ninguno? La pregunta se la realizan quienes ven que se está jugando a la ruleta rusa con cinco de las seis balas en el cargador del revólver.

Tal era la confusión en Washington que el economista Paul Krugman repitió ayer que EE.UU. se había convertido en una "república bananera con misiles nucleares".

* Editor general de "Clarín"

1 comentario:

  1. Cada día que pasa hay mayor acuerdo en comparar esta crisis con la de 1929, aunque debemos diferenciar el origen de ambas y, esperemos, que también su final. La Gran Depresión se inició en el mes de agosto del 29, tras un ligero descenso de la producción agregada que desembocó, dos meses después, en el crac bursátil. La crisis actual nace de un incorrecto comportamiento del sistema financiero, que se pone en evidencia con la crisis de las subprimes.Lo que diferencia notablemente una de otra son las reacciones inmediatas de los gobiernos. Como señalaba recientemente Paul Krugman, "el sistema político de hoy en día en EE. UU. no va a seguir el infame consejo de Andrew Mellon (secretario del Tesoro durante el crac de 1929) a Herbert Hoover (presidente de 1929 a 1933): "Liquida la mano de obra, liquida las acciones, liquida a los granjeros, liquida los bienes raíces". El gran rescate ya se ha iniciado. Si se hace bien, es probable que nadie se tire de un rascacielos.

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