Martínez, que calificó de "mala noticia" el resultado de la primera subasta del Fondo de Adquisición de Activos Financieros (FAAF) en la que se adjudicaron 2.115 millones de euros del total de 5.000 millones disponibles, confió en la utilidad de esta herramienta.
A su parecer, el fondo del Tesoro, dotado con hasta 50.000 millones de euros para comprar activos de alta calidad a los bancos y cajas de ahorro a cambio de liquidez, y las actuaciones del ICO por importe global de 44.680 millones en el próximo año, permitirán cubrir casi todas las necesidades de liquidez.
"Estarán casi cubiertas todas las necesidades de financiación para 2009 entre el Tesoro y el ICO", dijo Martínez, convencido de que el Fondo de Adquisición de Activos Financieros "va a funcionar bien", ya que las entidades acudirán a las pujas.
Según sus cálculos, la ralentización reducirá la necesidad de financiación de España el próximo año por debajo de los 120.000 millones de euros correspondientes a 2008, lo que supone el 10% del Producto Interior Bruto (PIB). "Para 2009 la necesidad de liquidez será algo más baja, de unos 85.000 millones", constató.
Sobre la adjudicación de menos de la mitad de la liquidez ofrecida en la subasta que tuvo lugar el pasado 20 de noviembre, argumentó que entonces era un instrumento nuevo, pero incidió en que las necesidades de liquidez "están ahí", junto a las fuertes presiones del entorno para que las entidades concedan créditos.
El presidente del ICO recalcó que los mercados financieros todavía permanecen cerrados para la obtención de liquidez, lo que somete a una enorme presión sobre los mercados de capitales, al tiempo que no se produce una adecuada discriminación del riesgo: ni de la deuda soberana de los países ni de las entidades.
En este sentido, advirtió de que "va a haber dificultades para colocar papel que no sea soberano (triple A)" por la coincidencia de planes de rescate articulados por los gobiernos de múltiples países para aliviar las dificultades de las entidades a la hora de conseguir dinero ante la cerrazón de los mercados mayoristas.
Asimismo, aseveró que el mercado está sometiendo a una discriminación "muy negativa" a las entidades españolas en cuanto a la emisión de deuda, y que sólo los dos mayores bancos (Santander y BBVA) están reconocidos fuera "como buenos", mientras que las cajas (La Caixa y Caja Madrid) que son "muy eficientes", se ven penalizadas "simplemente por llamarse cajas".
"No se coloca el papel emitido por las entidades financieras", lamentó Martínez, quien no obstante vaticinó que la normalización de los mercados financieros podría comenzar a advertirse en el primer semestre del próximo año, y que en el segundo se apreciará una reducción de las tensiones de liquidez.
El presidente del ICO consideró que la posición de España "no es la peor de la Eurozona" respecto a la deuda soberana, y que la financiación obtenida por las entidades del Banco Central Europeo (BCE) es adecuada, pese a las críticas de países que la ven excesiva. "El BCE no nos está dando más de lo que nos toca, partíamos de niveles muy bajos", incidió Martínez.
Al ser preguntado sobre las medidas articuladas por el Gobierno de Estados Unidos para salvar de la quiebra a Citigroup, Martínez consideró que este segundo rescate lanza un mensaje positivo para los mercados: que el Gobierno norteamericano ayudará a cualquier banco que lo necesite.
En este sentido, afirmó que la euforia vivida ayer en las bolsas de todo el mundo "parece que tiene cierta consistencia", aunque no se atrevió a aventurar si las bolsas empezarán a consolidar un recorrido alcista a partir de ahora. "Aunque el precio de las acciones esté bajo, no sé si se ha tocado suelo, aún quedan momentos complicados", avisó.
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