Así, la presión fiscal en España pasó de representar el 34,6% del PIB en 2004 al 37,2% en 2007 (2,6 puntos más), el segundo mayor incremento de los Quince, sólo superado por Portugal, donde la presión fiscal aumentó en el mismo periodo 2,7 puntos, hasta el 36,6% del PIB.
En cambio, la presión fiscal de España en 2006 comparada con la media de la UE-15 se situó 3,2 puntos por debajo, dado que en España alcanzó el 36,6% del PIB, frente al promedio del 39,8% en la UE-15.
Por su parte, la media de la presión fiscal en el conjunto de la OCDE en 2006, último dato disponible para todos los países, se situó en el 35,9%, mientras que en España se situó, ese mismo año, en el 36,6%, siete décimas más.
Analizando los países que conforman la UE-15, entre 2004 y 2007 se ha producido un incremento de la presión fiscal en nueve países, mientras que en seis se ha logrado reducirla. Además de España y Portugal, Italia e Irlanda registraron incrementos de 2,3 y 2,1 puntos, respectivamente, al tiempo que la presión fiscal en Alemania avanzó 1,4 puntos, hasta el 36,2% en 2007.
En Gran Bretaña, el aumento fue de 1,2 puntos (36,6%), mientras que en los Países Bajos se incrementó 0,7 puntos (38%). En Francia y Grecia, la presión fiscal se mantuvo sin variación entre 2004 y 2007.
No hay comentarios:
Publicar un comentario