jueves, 27 de noviembre de 2008

La recesión comienza a destrozar los dogmas económicos de la UE

BRUSELAS.- La crisis financiera y la recesión están comenzando a destrozar los dogmas que encuadran la vida económica de la Unión Europea (UE), con alzas del gasto público, aumento del déficit y flexibilidad de las reglas de libre competencia, algo impensable meses atrás.

El 16 de octubre, el presidente del Eurogrupo (foro de ministros de Finanzas de la Eurozona), Jean-Claude Juncker, considerado como un ortodoxo en materia presupuestaria, proclamaba que un "programa de reactivación generalizado" en Europa estaba "descartado", con el objetivo de evitar problemas de déficit.

Sin embargo, mes y medio más tarde los países europeos están aplicando un plan concertado para enfrentar una recesión cada vez más profunda.

Es cierto que ese plan es modesto, pero la Comisión Europea, gendarme en materia de déficit, creó un precedente el miércoles al pedir abiertamente a los Gobiernos nacionales que recurran al gasto público y al arma presupuestaria en su proyecto de reactivación de 260.000 millones de dólares.

"Esto habría sido impensable hasta hace poco tiempo" subraya el economista Jean Pisani-Ferry, director del centro de reflexión Bruegel con sede en Bruselas.

"La Comisión, que siempre ha tenido una doctrina económica muy poco 'keynesiana', escéptica sobre la política presupuestaria, reconoce hoy en día que ésta tiene un papel que desempeñar y saca conclusiones" sobre el déficit, agrega.

Oficialmente, Bruselas asegura que continuará llamando al orden a los países que excedan demasiado el límite europeo del 3% del PIB (Producto Interior Bruto) de déficit.

Pero, de facto, habrá una gran flexibilidad en la interpretación de las reglas, dando a los gobiernos un respiro de al menos dos años.

"En el pasado, la Comisión adoptó una línea bastante dura sobre las cuentas públicas. El hecho de que ahora aliente gastos adicionales es un punto de inflexión que refleja hasta qué punto las perspectivas económicas son malas", subraya la economista Jennifer McKeown, del instituto Capital Economics.

En ese sentido, el objetivo de un regreso al equilibrio presupuestario previsto para 2010 ha sido postergado 'sine die'.

Para la izquierda europea este cambio es bienvenido. "El tabú acaba de romperse. El principio de la realidad se ha impuesto a los guardianes del dogma", indicó Francis Wurts, presidente del grupo de Izquierda Unitaria del Europarlamento, compuesta por comunistas y ex comunistas.

El jefe de Estado francés, Nicolas Sarkozy, cuyo país ejerce la presidencia rotatoria de la UE, también había pedido a Bruselas que revisara sus "dogmas" sobre el déficit y las reglas de libre competencia ante la crisis.

"Pienso que eso ha tenido un papel" en el cambio de discurso de la Comisión, que "ha comprendido bien el mensaje", subraya un responsable francés que no quiso revelar su identidad.

Con la crisis bancaria, Bruselas se mostró también flexible en cuanto a la aplicación de las reglas sobre el control de las ayudas públicas y el respeto de una sana competencia, examinando con gran rapidez los planes de rescate de los Gobiernos europeos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario