El bombazo que el pasado miércoles soltó el vicepresidente ruso, Alexandre Zhukov, sobre las intenciones de Gazprom de adquirir el 20% que Sacyr Vallehermoso posee de Repsol YPF parece diluirse con el paso de los días.
El grupo constructor reconoció ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores que mantiene "contactos" y "negociaciones" con "posibles inversores que pudieran estar interesados", pero que hasta la fecha no se habían cerrado acuerdos y que, en todo caso, la decisión última sobre dichas participaciones correspondía a los accionistas, no a los políticos o a la petrolera.
Sin embargo, el presidente del Gobierno, durante una entrevista que se emitió en la Cadena SER en la noche de hoy, negaba la mayor y de forma contundente desmentía las declaraciones del vicepresidente ruso.
"Estamos en un debate que me ha sorprendido, porque tengo suficientemente conocimiento de las cosas como para saver que esto ni ha estado, ni está, ni estará en el horizonte de una iniciativa de Gazprom, ni por supuesto de Repsol", aseveró Zapatero, que añadió que "fue una declaración que nos sorprendió a muchos", pero que "no hay nada real, ni ha habido nada real" en ella.
De hecho, el jefe del Ejecutivo se mostró convencido de que la polémica en torno a la conveniencia de la entrada del gigante ruso en Repsol YPF "desaparecerá del debate a la misma velocidad que ha aparecido". En cualquier caso, el Gobierno, a través de su vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, ha dejado claro cuál es su posición respecto a este asunto.
En rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, De la Vega afirmó que "con carácter general no es partidario de que empresas estatales de otros países puedan participar en empresas privadas españolas de sectores estratégicos".
La vicepresidenta también dijo que el Gobierno no es consciente de que exista una oferta en firme sobre Repsol por parte del grupo ruso, por lo que "nos movemos en el terreno de la especulación", aunque "sigue con atención cualquier operación que afecte a empresas españolas".
En cualquier caso, el Ejecutivo deberá dar cuenta sobre este asunto en el Pleno del Congreso, pues durante la sesión de control al Gobierno el PP interpelará a uno de sus miembros. Es más, los populares tratarán de forzar la votación de una moción en la Cámara el próximo 25 de noviembre contra la toma de posición de monopolios extranjeros en sectores estratégicos para la economía española.
El debate sobre las intenciones de la compañía rusa tendrá lugar el martes, cuando el portavoz de Economía del PP, Cristobal Montoro, reclamará al Gobierno que utiliza su "potestad reguladora" para impedir que Gazprom entre en Repsol YPF. No obstante, puede que dicha moción no sea necesaria, pues hoy el portavoz de Gazprom negó que el gigante ruso esté interesado en participaciones de la compañía española.
"Gazprom nunca tuvo ni tiene ninguna intención de comprar el 20% de Repsol. Todos los comentarios al respecto se suscitaron porque alguien quiere vender su participación, no porque alguien quiera comprar", dijo Kupriyanov, que consideró una acción de este tipo como poco "atractiva" para su compañía.
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