miércoles, 10 de diciembre de 2008

El consumo de cemento se desplomará un 24% en 2008, la mayor caída de su historia en España

MADRID.- El consumo de cemento en España caerá alrededor de un 24% en 2008, con lo que se anotará la mayor caída de su historia como consecuencia del parón del sector de la construcción, sobre todo de nuevas viviendas, informó hoy la patronal del sector Oficemen.

La reducción contrasta con los récord de consumo registrados entre 1997 y 2007 y es la primera caída que este material de construcción registra en más de una década (desde 1996). Todo ello supondrá que el mercado cementero vuelva a niveles similares a los de 2003 (un consumo de unas 42 millones de toneladas, frente a los 56 millones de 2007).

Pese a todo, Oficemen considera que este descenso récord no supondrá "tocar fondo", dado que las cementeras dan por descontado que el consumo de cemento salde 2009 con una caída similar a la de 2008, indicó en rueda de prensa el presidente de la patronal, Jean Martín Saint León.

Por el momento, en los once primeros meses el consumo de este material de construcción se contrajo un 23%, tras el desplome del 41,5% del mes de noviembre.

Las menores ventas coinciden además con un incremento de costes, fundamentalmente en la "insostenible" factura energética que, según denuncia, ha crecido hasta un 35% desde la reciente liberalización eléctrica para grandes consumidores.

Pese a todo ello, la patronal descarta que por el momento la caída de la demanda de cemento se traduzca en pérdidas de puestos de trabajo en el sector, que emplea a 7.000 trabajadores directos.

La industria cementera sí advierte, por contra, del riesgo que corren unos 5.000 empleos del sector por deslocalización de fábricas en caso de que la UE apruebe gravar las emisiones de CO2, según los cálculos realizados para esta industria por una firma privada.

En cuanto a la actual coyuntura, por el momento los ajustes vienen del lado de las medidas de flexibilización que cada fabricante pueda poner en marcha y que fundamentalmente pasan por paradas de hornos y descenso de las importaciones e impulso de las exportaciones.

Así, a cierre del pasado mes de noviembre, la producción de cemento presentaba una caída del 21,5%, hasta las 39,75 millones de toneladas, y las importaciones se desplomaron un 43,8%. Por contra, las exportaciones casi se duplicaron (+91,6%).

Para evitar mayores descensos, Oficemen reclama al Gobierno medidas que contribuyan a soportar el sector de la construcción y a frenar la destrucción de empleo en el mismo, por considerar "insuficientes" las articuladas hasta el momento, sobre todo el fondo de inversión de 8.000 millones en obras locales.

En su opinión, el desplome de la construcción residencial se compensaría con la promoción de 100.000 viviendas sociales, "las únicas para las que actualmente hay mercado".

Para la patronal cementera, el impulso a las obras públicas, aunque también es necesario, no puede por sí solo compensar el descenso de la edificación de viviendas, por la menor mano de obra que requiere.

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