miércoles, 10 de diciembre de 2008

El FMI considera que el sector bancario español está en una situación más fuerte que en otros países

WASHINGTON.- Los bancos españoles han resistido bien hasta ahora las turbulencias financieras y se encuentran en una posición "más fuerte" que la de sus competidores de otros países, indicó una misión de expertos del Fondo Monetario Internacional (FMI) tras una visita a Madrid.

En este sentido, el grupo de expertos de la institución señala que el sector bancario español se ha visto favorecido en las recientes turbulencias financieras por una "sólida supervisión y una regulación prudencial", así como por su sólido modelo tradicional de banca al por menor.

"Las provisiones anticíclicas y un tratamiento riguroso de los instrumentos fuera de balance han situado al sector bancario español en una posición más fuerte que la de los bancos de muchos otros países", indicaron.

De este modo, los expertos del FMI destacaron que los bancos españoles son gestionados de manera "conservadora y, en la práctica, no tienen ningún activo tóxico en su balance", apuntando que, mientras que los préstamos dudosos han aumentado rápidamente, los amplios colchones de provisiones les han permitido ganar un tiempo precioso y mantener ratios de beneficios y capital saludables.

Asimismo, la institución internacional apunta que la gestión de activos y de capital se ha mantenido totalmente con criterios de mercado, sin ninguna intervención del Gobierno y sin ninguna quiebra bancaria, a pesar de la brusca ralentización.

Por otro lado, la misión del FMI señala que la fuerte dependencia de los mercados mayoristas hace de la financiación el talón de Aquiles del sistema bancario español, aunque precisa que las autoridades, en colaboración con sus socios europeos, han tomado medidas precisas orientadas a aumentar la confianza y facilitar la financiación de los bancos.

No obstante, el FMI considera que, de cara al futuro, el entorno operativo de los bancos va a seguir siendo "extraordinariamente complicado", por lo que afirma que las autoridades tienen que permanecer muy atentas y estar preparadas para actuar "si es necesaria una consolidación".

De hecho, los expertos del Fondo apuntan que la dislocación persistente de los mercados al por mayor, unos altos costes de financiación, un empeoramiento de la calidad de los activos y una desaceleración del crecimiento de los préstamos pesan en las perspectivas de los bancos, por lo que "pueden tener lugar procesos de concentración", que deberían llevarse a cabo en términos de mercado, sin interferencias políticas, aunque con disposición a actuar si surgen presiones sistémicas.

Por otro lado, la misión del FMI acoge favorablemente el progreso de las cajas de ahorros en la búsqueda de disciplina de mercado con la emisión de cuotas participativas.

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