"Tras involucrar al gobierno a tal punto en tantas instituciones financieras privadas, creo que ahora debemos elaborar el marco de nuestra estrategia de salida de este sinnúmero de nuevos programas y compromisos", agregó Christopher Cox.
La presidenta de la Corporación Federal de Seguros de Depósitos, Sheila Bair, llegó a la misma conclusión a principios de la semana, y los legisladores han comenzado a presionar al gobierno para que explique su estrategia de salida.
La SEC (siglas en inglés de la comisión) no está directamente relacionada en las multimillonarias gestiones gubernamentales de rescate, aunque supervisa las operaciones de las firmas corredoras y financieras de los grandes bancos que han recibido miles de millones de dólares del erario.
La estrategia de salida del gobierno "debería ser consistente con los objetivos fundamentales de las propias intervenciones, y con la protección de los contribuyentes", dijo Cox en un discurso pronunciado ante afiliadas a Mujeres en Viviendas y Finanzas y el Exchequer Club, dos grupos de Washington.
"Pese a que encabezamos lo que son inversiones gubernamentales a varios años, así como garantías y fideicomisos, es vital comprender a dónde vamos, o de lo contrario nunca llegaremos al destino deseado de devolver plenamente estas instituciones a la propiedad y financiación privadas", agregó.
La intervención gubernamental sin precedentes _ incluyendo la participación accionaria por miles de millones de dólares en los grandes bancos estadounidenses _ podría perjudicar la labor fiscalizadora de la SEC al violar la separación de relaciones entre el gobierno y las empresas que regula, dijo Cox.
"Cuando el gobierno pasa a ser al mismo tiempo el árbitro y el jugador, el juego cambia de forma espectacular para los otros participantes", insistió Cox.
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