Felipe González dice que en España crece más el paro porque se ha bajado "de golpe" la escalera del crecimiento

MADRID.- El ex presidente del Gobierno Felipe González subrayó que en España se destruye más empleo que en otros países europeos porque hasta ahora se creaba más rápidamente y, en un escenario de recesión global, el impacto en España es mayor.

"Quien viene de crecer al 1% y pasa al cero por ciento destruye menos empleo que quien viene de crecer al 4,5% y pasa al cero por ciento", afirmó.

"Es elemental, pero no se dice con esa claridad", afirmó González durante su intervención en el Consejo del Partido de los Socialistas Europeos (PES) que se celebra en Madrid.

"Bajar del 1 al cero por ciento es doloroso pero es bajar un escalón, pero bajar del 4 o el 4,5% es bajar la escalera y a veces de golpe. Eso explica nuestra situación", añadió.

En un día en que se ha conocido que el desempleo ha llegado a su nivel más alto de los últimos 12 años, rozando los tres millones de desempleados, el ex líder socialista afirmó que la economía española viene de avanzar mucho más rápido que la UE en crecimiento y en empleo, y añadió que aunque "hay un componente que es propio de la economía española, un exceso de dependencia del ladrillo y del cemento, hay otro componente que es común a todos, que toda Europa va a entrar en recesión o casi en recesión".

González, que ha sido elegido para presidir el grupo de reflexión de la UE para el horizonte de 2030, dedicó buena parte de su intervención ante los socialistas europeos a la crisis económica --"creo que va a durar, es difícil diagnosticarla y combatirla", dijo--.

Subrayó además que él hizo un informe en 1999 para la Internacional Socialista en la que alertó de que el sistema financiero se estaba convirtiendo en un "casino" sin reglas que crecía 10 o 15 veces más que la economía real. "Y estos días la banca saltó, se acabó el juego", añadió.

Así, destacó que la década de los noventa fue "de anomia, de falta de reglas" y de confiar en que "el mercado lo va a arreglar todo", mientras que ahora "la mano invisible reclama a la política para que resuelva los problemas que la mano invisible creó".

Sin embargo, tras muchos años "fuera de juego", alertó de que "la política puede estar algo desentrenada" para hacer frente a la crisis.

El ex presidente respaldó las medidas que han tomado los gobiernos europeos para hacer frente a la crisis, pero advirtió de que se han hecho al margen de las "reglas, límites y topes" del funcionamiento normal de la UE y que luego la Comisión Europea ha tenido que abrir "un paraguas" para cubrir las medidas y "rescatar" el funcionamiento comunitario.

Eso sí, admitió que la "intervención masiva" era necesaria para evitar el "agravamiento de la crisis, la necrosis del aparato productivo" y, por lo tanto, el empeoramiento del desempleo.

González llamó a los socialistas europeos a mejorar la comunicación con los ciudadanos, y advirtió de que si la UE sólo se comunicara a través de las resoluciones del Consejo Europeo, "la comunicación sería cero".

"Además de hacer un buen manifiesto y tener unas buenas listas, hay que recuperar un lenguaje para que nos entiendan", afirmó, un día después de que los líderes del PES aprobaran en Madrid su manifiesto para las europeas de 2009.

Además, advirtió a los socialdemócratas que su defensa del Estado del bienestar y la cohesión no puede ser "defensiva" sino que tienen que ser capaces de explicar cómo se financia el modelo económico que proponen, y cómo contribuirá a que la economía europea recupere la competitividad porque ahora "está perdiendo la capacidad de ser una potencia tecnológica de primer orden", de modo que no sólo la industria europea se deslocaliza, sino que sus centros de excelencia son comprados por grandes empresas de países emergentes como India o China.

En la misma línea, avisó de que Europa tiene "algún elemento grave de crisis en el modelo", alguno de ellos "endógeno" como el envejecimiento de la población y, en este punto, elogió la contribución de los inmigrantes "que vinieron a salvar las pensiones" europeas y negó que exista el 'efecto llamada' por tal o cual disposición concreta de una ley, "como si se estuvieran en Senegal o en el Africa subsahariana leyendo el BOE".

González no evitó ver a los inmigrantes "como necesidad y como problema" --"sin ellos no podemos pero su llegada nos inquieta", admitió--, y advirtió de que es "un disparate, una tontería" que en la UE y en particular en la zona de libre circulación Schengen haya "10 o 12 políticas migratorias".

"No tenemos más remedio que hacer una política común no sólo de fronteras, sino también en origen", avisó, porque las personas "se van a seguir moviendo" mientras los flujos de capitales no lleguen "a sus lugares de origen".

Alertó además de que Europa no será fuerte si no se toma en serio la política exterior y de seguridad y consideró que para ello, en lugar de tener al 90% de sus fuerzas armadas dedicadas a la defensa territorial, debería tener "150.000 personas disponibles" para actuar como fuerza de interposición cuando se presenta una crisis, en lugar de que haya "una subasta" a ver quién ofrece más cada vez que es necesario enviar tropas al exterior.