El Ministerio para la Energía informó en su página de internet que la cesta venezolana se ubicó en 34,49 dólares por barril, lo que implicó un descenso de 5,1 dólares en comparación con el valor de cierre del 28 de noviembre.
En los últimos cuatro meses, la cesta venezolana ha reportado una baja de 73,3% que ha llevado el precio promedio del año a 91,62 dólares. En julio los crudos venezolanos alcanzaron un techo de 129,54 dólares.
El gobierno atribuyó la caída del precio de la cesta venezolana a "la liquidación de contratos de crudos en los mercados a futuro de petróleo, debido a la recesión económica en los principales países consumidores, que se está reflejando en un deterioro de la demanda petrolera".
Los precios petroleros en los mercados mundiales experimentaron el viernes un nuevo descenso que los hizo caer a niveles de 40 dólares por barril.
Venezuela mantiene una fuerte dependencia del petróleo debido a que financia cerca de la mitad de los ingresos del gobierno, y representa el 94% de las entradas que recibe el país por exportaciones.
El presidente venezolano Hugo Chávez admitió esta semana que era muy difícil que ningún país no se vea afectado por la crisis financiera mundial, pero no realizó ninguna alusión sobre Venezuela.
El ministro de Economía y Finanzas, Alí Rodríguez, dijo en octubre pasado que las finanzas del gobierno venezolano podrían complicarse de ubicarse el precio promedio anual de la cesta petrolero por debajo de 60 dólares por barril.
El gobierno presentó octubre pasado a la Asamblea Nacional un proyecto de presupuesto para el próximo año de 167.400 millones de bolívares fuertes (unos 77.860 millones de dólares), que supera en 22% el plan de gastos e ingresos fiscales de este año.
El Ministerio de Economía y Finanzas calculó el presupuesto para el próximo año bajo el escenario de 60 dólares por barril.
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