MÉXICO.- Las empresas mexicanas crearán entre 200.000 y 250.000 nuevos empleos en 2009, frente a los 375.000 de los 11 primeros meses de este año, debido a la crisis económica que se cierne sobre el país, según vaticina la Asociación Mexicana en Dirección de Recursos Humanos (Amedirh).
El director general de la Amedirh, Pedro Borda, señaló en una rueda de prensa que se prevé esa caída en la generación del empleo, pero advirtió de que los despidos no serán la solución a la crisis.
"Saldremos adelante de la situación, sólo es un bache en el camino, saldremos librados", sostuvo el representante sectorial.
El objetivo del Gobierno mexicano para 2008 en materia laboral era crear 800.000 puestos de trabajo pero el desfavorable entorno económico ha hecho que hasta noviembre pasado sólo se haya logrado crear 375.000 nuevos puestos, según cifras de la secretaría de Trabajo.
Borda afirmó que en tiempos de crisis los empresarios de México deben "fomentar el empleo y capacitar al personal de las empresas" e invitar a empleadores, sindicatos, legisladores y autoridades laborales "a reflexionar sobre las soluciones para superar este desafío".
"La alternativa puede ser (tanto) ajustes de personal como reubicación temporal en otras áreas, reducir jornadas laborales, impulsar la capacitación con miras a fortalecer al personal para mejores épocas", añadió.
En el actual contexto, la Amedirh recomendó a las compañías "mantener comunicación permanente con el personal para informarle sobre la situación real que vive la empresa, ya que la desinformación provoca rumores, desaliento y desilusión".
Además, les aconsejó preservar sus flujos de efectivo y la estructura financiera, para lo que sería necesario revisar presupuestos de ingresos y gastos, ahorrar y posponer acciones no indispensables.
Datos oficiales señalan que en México hay 1,98 millones de personas sin empleo lo que sitúa la tasa de desocupación en el 4,2 por ciento, indicó el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).
Además de los 1,9 millones de desempleados, la población subocupada (trabajadores que se emplean por un número reducido de horas) ascendió a 2,9 millones, la mayor parte en el sector primario, según el INEGI.
El Instituto Nacional de Estadística considera ocupadas a las personas mayores de 14 años que trabajaron por lo menos una hora a la semana.
El director general de la Amedirh, Pedro Borda, señaló en una rueda de prensa que se prevé esa caída en la generación del empleo, pero advirtió de que los despidos no serán la solución a la crisis.
"Saldremos adelante de la situación, sólo es un bache en el camino, saldremos librados", sostuvo el representante sectorial.
El objetivo del Gobierno mexicano para 2008 en materia laboral era crear 800.000 puestos de trabajo pero el desfavorable entorno económico ha hecho que hasta noviembre pasado sólo se haya logrado crear 375.000 nuevos puestos, según cifras de la secretaría de Trabajo.
Borda afirmó que en tiempos de crisis los empresarios de México deben "fomentar el empleo y capacitar al personal de las empresas" e invitar a empleadores, sindicatos, legisladores y autoridades laborales "a reflexionar sobre las soluciones para superar este desafío".
"La alternativa puede ser (tanto) ajustes de personal como reubicación temporal en otras áreas, reducir jornadas laborales, impulsar la capacitación con miras a fortalecer al personal para mejores épocas", añadió.
En el actual contexto, la Amedirh recomendó a las compañías "mantener comunicación permanente con el personal para informarle sobre la situación real que vive la empresa, ya que la desinformación provoca rumores, desaliento y desilusión".
Además, les aconsejó preservar sus flujos de efectivo y la estructura financiera, para lo que sería necesario revisar presupuestos de ingresos y gastos, ahorrar y posponer acciones no indispensables.
Datos oficiales señalan que en México hay 1,98 millones de personas sin empleo lo que sitúa la tasa de desocupación en el 4,2 por ciento, indicó el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).
Además de los 1,9 millones de desempleados, la población subocupada (trabajadores que se emplean por un número reducido de horas) ascendió a 2,9 millones, la mayor parte en el sector primario, según el INEGI.
El Instituto Nacional de Estadística considera ocupadas a las personas mayores de 14 años que trabajaron por lo menos una hora a la semana.
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