Rato advierte de que la crisis no ha "tocado fondo" y augura que 2009 "no será un año fácil"

SANTANDER.- El ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Rodrigo Rato advirtió hoy en Santander de que la crisis económica aún "no ha tocado fondo", y auguró que 2009 "no será un año fácil".

En un encuentro con empresarios organizado por la patronal cántabra, el también ex ministro de Economía y actual asesor del Banco Santander y Criteria, respondió a las preguntas que le realizaron los asistentes a un almuerzo posterior a su intervención en el foro empresarial '¿Cómo afrontar la crisis económica?', organizado por CEOE-Cepyme Cantabria, entre ellas, cuándo se reconducirá la actual situación económica.

"Tocar fondo, no lo hemos tocado", aseveró Rato, quien añadió que "las cosas no están nada bien". A continuación, señaló que lo que habría que plantearse es "dónde está el fondo" e indicó que un elemento determinante es el sector inmobiliario, que todavía no se ha ha acercado al final de la crisis.

Otro aspecto de medición es, según Rato, el sector financiero, donde con la liquidez inyectada, se debería estar "cerca de tocar fondo". El tercer elemento que apuntó fue la reducción de la deuda, "una de las digestiones" que España debe afrontar para salir de la desaceleración económica. Por todo ello, indicó que se trata de una crisis "que por desgracia no se va a medir en trimestres".

En otro momento de su intervención ante el empresariado cántabro y los representantes políticos que asistieron al encuentro, Rodrigo Rato se refirió al déficit exterior español y aseguró que es el "principal problema" de la economía española.

Destacó al respecto que un déficit exterior del 10% del PIB es "imposible de soportar para España" y es necesario reducirlo, para lo cual habría que aumentar las exportaciones y reducir las importaciones y hacer un ajuste "real" de la economía.

A nivel internacional, Rato señaló que las medidas que están adoptando los gobiernos no pueden tener efectos "inmediatos", sino que tienen que "acolchonar" la crisis y preparar a los países para salir con más rapidez de ella.

Advirtió además de que si no hay reformas estructurales en Europa, la economía "se ajustará sola" con más desempleo, por lo que indicó que a los gobiernos les queda por delante "una tarea muy difícil", que es gastar "bien" y cambiar las estructuras.

En este sentido, reconoció que existen "intereses creados que son muy difíciles de cambiar", y señaló que en Europa "nadie quiere plantearse eso todavía", sino que "todo se quiere arreglar con gasto público", pero advirtió que "cuanto más se tarde, peor" será.

Respecto a los responsables de la crisis, Rodrigo Rato señaló que son "una parte del sector financiero" que ha introducido elementos "viciados y en algunos casos muy opacos"; la regulación existente en algunos países y los problemas de supervisión. "Cada palo debe aguantar su vela", concluyó.