domingo, 4 de mayo de 2008

Brown promete cambios económicos tras derrota electoral

LONDRES.- El primer ministro de Gran Bretaña, Gordon Brown, dijo el domingo que varios factores contribuyeron a que su partido sufriera su peor derrota en elecciones locales en los últimos 40 años, como la preocupación social por el aumento de los precios de alimentos, gasolina y electricidad.

Brown respondió a críticas de que los resultados de los comicios han causado gran desconfianza acerca de su liderazgo en las filas del Partido Laborista.

El partido obtuvo apenas un 24% de los votos en las elecciones del jueves en Inglaterra y en Gales. Los laboristas también perdieron el control de la alcaldía de Londres a manos del candidato conservador Boris Johnson.

"Me siento responsable. No hay excusas de mi parte para lo ocurrido", dijo Brown a la cadena British Broadcasting Corp.

Al responder a críticas acerca de su personalidad adusta, Brown admitió que no era tan extrovertido como algunos votantes desean.

"Creo que es cierto que soy una persona que guarda la privacidad en el ruedo político", dijo el primer ministro.

Sin embargo, se negó a aceptar que los votantes lo han abandonado, e insistió en que sigue siendo el mejor líder de su partido.

"Mis antecedentes son bastante ordinarios ... Entiendo lo que las personas están pensando y entiendo lo que las personas sienten, y creo que soy la persona adecuada para conducir al país en estos momentos difíciles", dijo Brown a la emisora de televisión de la BBC.

Indicó que el gobierno debe ahora mostrar un plan "claro e inequívoco" para lidiar con el descenso de la actividad económica.

"Lo que preocupa más a las personas ... es que suben los precios del petróleo, que los precios de los alimentos suben, y están preocupadas por las cuentas de electricidad, y sobre sus estándares de vida, y hay incertidumbre sobre la economía", señaló.

La crisis 'subprime' abre la caja de Pandora en los mayores bancos

FRANCFORT.- La tormenta financiera desatada por la crisis de los créditos hipotecarios de riesgo en Estados Unidos ha abierto una caja de Pandora de gigantescas pérdidas y mea culpas de los mayores bancos del mundo, y se auguran nuevas víctimas.

La palma del mayor perjudicado del mundo por la crisis 'subprime' se la lleva UBS, primer banco suizo, que anunció en abril una depreciación de activos récord de más de 37.000 millones de dólares (casi 24.000 millones de euros) desde el inicio de la tormenta, y aguarda pérdidas por 11.750 millones de dólares (7.600 millones de euros) en el primer trimestre de 2008.

En segundo lugar se ubica Citigroup, la institución más afectada por la crisis en Estados Unidos, con depreciaciones totales desde noviembre pasado por 35.000 millones de dólares. Citigroup, el banco estadounidense más afectado por la crisis 'subprime', captó el miércoles 4.500 millones de dólares en el mercado, tras anunciar una pérdida neta de 5.100 millones de dólares en el primer trimestre y la eliminación de 9.000 puestos adicionales.

El mayor banco de Alemania, Deutsche Bank, que hasta hace poco se creía a salvo de las turbulencias, anunció el martes sus primeras pérdidas trimestrales en cinco años a raíz de la depreciación de activos por 2.700 millones de euros (4.200 millones de dólares).

Y los bancos británicos están haciendo limpieza a fondo para intentar dejar atrás la crisis del crédito: una semana después de la recaudación de fondos del gigante Royal Bank of Scotland (RBS), su rival HBOS anunció el martes una nueva serie de depreciaciones y acudió a sus accionistas para capitalizarse.

HBOS, quinto banco del Reino Unido en términos de capitalización y número uno en préstamos inmobiliarios, hará un aumento de capital de 5.000 millones de euros, tras haber perdido unos 3.600 millones de euros en depreciaciones ligadas a colocaciones de riesgo desde comienzos del año.

RBS prevé además la supresión de 7.000 puestos de trabajo a raíz de la integración de la filial de banco de negocios del ABN Amro, que compró el año pasado, según el diario británico Financial Times.

En Estados Unidos, la racha de malas noticias no parece haber acabado. El Bank of America, principal banco comercial del país, sufrió en el primer trimestre una caída de sus ganancias del 77% debido a la proliferación de los casos de insolvencia, y advirtió de que la crisis durará por lo menos hasta fin de año.

Wachovia, el quinto banco comercial del país, perdió 350 millones de dólares, tras haber pasado 2.800 millones de dólares a créditos dudosos.

El panorama se complica en ambos lados del Atlántico. Hace una semana, el segundo banco suizo, Credit Suisse, anunció que cerró sus cuentas en rojo por primera vez en cinco años, con una pérdida de 1.330 millones de euros (2.110 millones de dólares) y más depreciaciones en el primer trimestre por la crisis 'subprime'.

Y Japón, aunque menos afectado que los bancos estadounidenses y europeos, también ha recibido malas noticias. Según el diario económico japonés Nikkei, las pérdidas ligadas al 'subprime' se elevan en total a 5.600 millones de euros en los ocho principales bancos de Japón en el ejercicio cerrado a fines de marzo.

La crisis financiera ha modificado profundamente el ránking mundial de bancos y ahora tres de los cuatro mayores del mundo en términos de capitalización bursátil son chinos, según un estudio del Boston Consulting Group (BCG) difundido el miércoles. La lista está encabezada por el Industrial and Commercial Bank of China (ICBC), primer banco del mundo, con cerca de 340.000 millones de dólares de capitalización bursátil.

El China Construction Bank y el Bank of China, se encuentran en segundo y cuarto lugar. El banco británico HSBC ocupa el tercer lugar, mientras el Bank of America, en quinto lugar, es el primer banco estadounidense de la clasificación. El ex líder mundial, Citigroup, llega ahora sexto.

La Fed no deja claro si habrá más recortes de tasas

WASHINGTON.- La Reserva Federal (Fed) estadounidense dio a los mercados el recorte de tasas que esperaban, pero sin satisfacer por ahora a los que esperaban el anuncio simultáneo del fin del actual ciclo de flexibilización monetaria.

La decisión tomada el miércoles por el Comité de Política Monetaria (FOMC) de la Fed llevó la tasa interbancaria de préstamos de un día al 2,0%, una bajada muy fuerte respecto del 5,25% en vigor hasta septiembre, cuando la Reserva Federal se decidió a sostener una economía desfalleciente.

Hasta aquí, nada de sorprendente, pero el comunicado publicado por la Fed, subrayando a la vez sus preocupaciones ante la desaceleración de la economia y el retorno de la inflación, ha suscitado interpretaciones variadas.

Varios analistas esperaban que el presidente de la Fed, Ben Bernanke (en la imagen), señalara de una vez por todas que esta bajada sería la última. Para el economista Stephen Gallagher, de la Societé General, la pausa anunciada por la Fed era de hecho "no apremiante". "No debe ser interpretada como el fin de la reducción de las tasas", estimó.

"Un deterioro mayor del mercado de trabajo y el riesgo siempre posible de nuevas turbulencias en los mercados siguen constituyendo factores que, en su conjunto, podrían generar fácilmente nuevas reducciones de tasas", según él.

Para Peter Kretzmer, del Bank of America, la Fed "podría muy bien hacer una pausa en junio y medir el impacto de la flexibilización sobre la economía" estadounidense.

Otras fuentes evalúan que ha mantenido deliberadamente en la vaguedad su decisión, que una vez más ilustró sus divisiones ante la amenaza inflacionaria. Dos de cada diez votantes se pronunciaron en contra de la decisión de bajar las tasas, una medida que podría desencadenar el alza de precios.

"Tratar de entender este comunicado es algo muy parecido a intentar una interpretación de la Biblia", opinó Robert Brusca, de FAO Economics. "El lenguaje permanece oscuro, pero queda claro que la Fed está lista para entrar en acción".

Brusca observa que las reducciones de las tasas practicadas hasta ahora por la Fed "no apuntan a bajar las tasas que son importantes para los consumidores", como las del crédito inmobiliario.

"Se dirá que la Fed reconoce que la economía está debilitada, pero subraya que esa debilidad no es tan aguda... Y mantiene su preocupación por la inflación ¿pero en qué medida? Sería difícil decirlo".

La Fed mostró en su comunicado una postura ligeramente diferente al documento que emitió en su reunión de marzo. Al decir que la economía estadounidense estaba "débil" en lugar de decir que se debilitaba, puede dar la impresión de que la Fed cree en una estabilización, dicen algunos analistas.

"Para mí, la Fed se muestra un poco menos preocupada por la situación de la economía y un poco más por la inflación", subraya el economista independiente Joel Joel Naroff. "Eso es muy sabio de su parte", agrega Eugenio Aleman, de Wells Fargo. "Todo el mundo dice que la expectativa de inflación está al alza y es para mí el mayor riesgo de futuro".

Para Naroff, ha dejado sus opciones abiertas, ante la incertidumbre que rodea la coyuntura estadounidense. El Comité de Política Monetaria "necesita una cierta flexibilidad para actuar si hay nuevas sorpresas o si la economía no se recupera de acuerdo con lo esperado", resumió.

La Agencia Tributaria recaudó 60 millones hasta marzo por la investigación de operaciones con billetes de 500 euros

MADRID.- El director de la Agencia Tributaria (AEAT), Luis Pedroche, anunció hoy que la investigación de operaciones con billetes de 500 euros realizadas en los años 2003, 2004 y 2005, ha permitido al fisco recaudar "60 millones de euros hasta el 31 de marzo por autoliquidaciones extemporáneas" de contribuyentes investigados.

Esta cifra supera en 13 millones de euros la recaudación calculada a mediados del mes de febrero, que ascendía a 47 millones de euros. Además, "en el mes de abril, se han seguido produciendo ingresos por parte de otros contribuyentes y en los próximos días van a seguir creciendo", avanzó Pedroche.

Según indicó, esta recaudación es causa directa de las pesquisas en marcha para investigar delitos fiscales relacionados con el uso de billetes de 500 euros en unas 12.000 operaciones desde 2003. Así, el director de la AEAT precisó que estas declaraciones extemporáneas corresponden a contribuyentes a los que se les ha hecho algún tipo de requerimiento para que justifiquen el uso de estos billetes.

Además, el director de la Agencia Tributaria aseguró que "prácticamente se ha concluido la primera fase de investigación" de las 4.195 operaciones correspondientes año 2003 que fueron objeto observación, de las que entre el 60% y el 70% son sospechosas de estar relacionadas con algún fraude.

Los posibles delitos cometidos a través de estas operaciones prescribirán el próximo 31 de junio, trascurridos cuatro años de la debida declaración de IRPF o Impuesto sobre Sociedades. Así, Pedroche precisó que, dada la urgencia, la Agencia ha dedicado los últimos tres meses a investigar cada una de estas operaciones.

Esto ha permitido, detectar movimientos en los que se entiende que ha habido un incumplimiento tributario. "En algunos de estos casos, ya se ha iniciado una inspección. Otras las vamos a iniciar durante el mes de mayo", anunció Pedroche.

"Del proceso que hemos llevado a cabo se irán concluyendo actas de inspección, que tiene un periodo de maduración cercano a los 12 meses en los casos más complejos. Por tanto, estamos concluyendo alguna de ellas", dijo.

Por otro lado, y sin querer concretar cifras, Pedroche aseguró que, a 31 de marzo, la Agencia Tributaria "está en un cumplimiento por encima del 100% en la mensualización de los objetivos para 2008, tanto en materia de prevención como en lucha contra el fraude". "Estamos satisfechos, sin caer en la autocomplacencia", precisó.

El sector inmobiliario ha sido uno de los focos de atención de las investigaciones de la AEAT relacionadas con las operaciones con billetes de 500 euros y, según Pedroche, a día de hoy, "el control permanente (desplegado por la Agencia) ha ido produciendo un mejor cumplimiento (tributario)".

Ante la reivindicación de la Organización Profesional de Inspectores de Hacienda de la necesidad de ampliar la plantilla para el adecuado cumplimiento de su labor, el director de la AEAT apuntó que el personal de su departamento, que roza las 28.000 personas, se verá ampliado en otras 5.000 en los próximos tres años.

De hecho, las ofertas públicas de empleo han venido sumando cada vez más efectivos en los últimos años. "Habitualmente, el número de inspectores que venían entrando era de 60, ahora estamos en ofertas de 90, mientras que en el caso de los técnicos de Hacienda se ha pasado de 125 a 500 personas".

"Pretendemos mantener ese nivel de oferta de empleo, ya que permitirá prestar un mejor servicio y llevar a cabo mecanismos de control más eficientes y más amplios", concluyó Pedroche.

Tras un abril mejor de lo esperado, Wall Street quiere mejorar

NUEVA YORK.- Tras un abril algo mejor que lo previsto, la Bolsa de Nueva York espera un calendario ligero para la semana entrante, con escasas novedades macroeconómicas y de empresas.

La semana que termina "fue decisiva, marcó el inicio de un cambio de mentalidad de los inversores y los economistas", explicó Marc Pado, estratega de la casa de corretaje Cantor Fitzgerald. De pesimista sobre el estado de la economía estadounidense, Wall Street se muestra ahora neutro, estima Pado. "Los inversionistas están en una fase de transición", estima.

Mientras el producto interno bruto (PIB) estadounidense progresó mejor de lo previsto en el primer trimestre, el empleo se deterioró menos que lo esperado en abril, la tasa de desempleo bajó y el dólar se recuperó, superando los 1,54 por euro.

"El escenario de catástrofe ya quedó descartado", estima Rich Peterson, analista en Thomson Financial.

La principal plaza financiera del mundo vivió así "su mejor mes de abril de los últimos cuatro años", subrayó Pado.

El índice Dow Jones subió un 4,54%, el Nasdaq, de fuerte composición tecnológica, un 5,86%, y el SP 500 un 4,76%. El Dow Jones cerró por encima de la barrera de 13.000 puntos por primera vez desde el 3 de enero, a 13.058,20 puntos (+1,29%). El Nasdaq, por su parte, subió un 2,23%, a 2.476,99 puntos, y el SP 500 un 1,14%, a 1.413,90 puntos.

La inflexibilidad francesa irrita a la UE y complica negociaciones de la OMC

BRUSELAS.- Tras años de duras y muchas veces vanas discusiones, los negociadores en la OMC juzgan cercano un acuerdo sobre el capítulo agrícola de la ronda de Doha, que podría sellarse en las próximas semanas, aunque critican a Francia por sabotear las iniciativas de compromiso.

Una fuente europea calificó de "grotescas" las reiteradas advertencias de París en las últimas semanas sobre el riesgo que implicará un pacto en la OMC (Organización Mundial del Comercio) para el futuro de la Política Agrícola Común (PAC) de la UE. En Francia "algunos están dispuestos a utilizar cualquier argumento para impedir un acuerdo", dijo otra fuente comunitaria de alto rango que no quiso revelar su identidad.

La irritación en la Comisión Europea, que negocia en nombre de los 27 países de la Unión Europea, es aún mayor si se tiene en cuenta que por primera vez se vislumbra la posibilidad de un compromiso en el área de agricultura.

"Las grandes líneas de un acuerdo están sobre la mesa", indicó recientemente el comisario europeo de Comercio, el liberal Peter Mandelson, blanco privilegiado de los responsables franceses, que lo acusan de estar dispuesto a sacrificar los intereses agrícolas de Europa en el altar del libre comercio.

La ronda de Doha de la OMC para reducir las barreras comerciales fue lanzada en la capital de Qatar en noviembre de 2001 con el objetivo de llegar a un acuerdo para 2004, pero desde entonces se ha trastabillado, principalmente por disputas entre países desarrollados y en desarrollo.

Mientras los países del Sur reclaman una fuerte reducción de los subsidios y las barreras aduaneras agrícolas de la UE y Estados Unidos, las potencias quieren a cambio un mayor acceso a los mercados industriales y de servicios de las naciones emergentes.

Según una fuente europea, "un acuerdo es posible" sobre el capítulo agrícola sobre "las mejores" bases. Los puntos de discordia aún en suspenso abarcan en particular los denominados "productos sensibles", como la carne bovina o las aves, que Europa quiere seguir protegiendo de países como Brasil o Argentina con aranceles más elevados.

Pero Francia, principal beneficiario de la PAC, lleva adelante una campaña desde hace semana contra lo que denuncia como una renuncia de los intereses agrícolas europeos, iniciativa en la que cuenta con el apoyo de Alemania e Irlanda. "Las cuentas no cuadran" en la OMC, advirtió la semana pasada la secretaria de Estado francesa de Comercio Exterior, Anne-Marie Idrac.

Para Francia, la disparada de los precios de los alimentos es una razón de más para mostrarse firme. Esta situación ha creado "un contexto nuevo y la opinión pública se pregunta si las negociaciones para la apertura de los mercados pueden ayudar a la seguridad alimentaria", dijo Idrac.

En privado, muchos responsables franceses ya han crucificado la ronda de Doha y sueñan con ver a la agricultura fuera de la OMC y las leyes de libre comercio. Para justificar su posición, esos responsables afirman que la UE no obtuvo prácticamente nada de la apertura de los mercados industriales de los países emergentes, algo que reconocen los propios negociadores europeos.

En estas condiciones, un acuerdo global en la OMC parece muy incierto. Por el momento, el objetivo es reunir a fines de mayo o junio a los principales países concernidos en la negociación para discutir un bosquejo de compromiso.

Ésa es la fecha límite para contar después con el tiempo suficiente para concluir los complejos detalles del acuerdo antes de fin de año y de la llegada de un nuevo presidente norteamericano, que podría hacer revisar todo el proceso.

Los gobiernos asiáticos tratan de contener los elevados precios del arroz

HONG-KONG.- Con racionamientos, subvenciones, organización de carteles o limitación de exportaciones, los países asiáticos productores de arroz intentan a toda costa proteger a sus poblaciones de la incesante carestía de este alimento básico en la región.

"Los países productores limitan las exportaciones porque están preocupados por la situación del mercado nacional", explicó Jonathan Pincus (en la imagen), economista del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Vietnam.

Prueba de esa inquietud, los ministros de Comercio de la Asociación de las Naciones del Sureste Asiático (ASEAN), reunidos en Jakarta, acordaron el sábado actuar en conjunto para estabilizar el precio del arroz y aumentar la producción.

A menudo criticados por su lentitud en la toma de decisiones, los miembros del "grupo de los Diez" reaccionaron rápidamente, decidiendo "ayudarse mutuamente para estabilizar los precios (de los alimentos) a escala global y abstenerse de cualquier medida que pueda perturbar el precio del arroz", según la ministra indonesia de Comercio, Marie Elka Pangestu.

Son miembros de la ASEAN Tailandia, Indonesia, Malasia, Filipinas, Singapur, Vietnam, Brunei, Laos, Camboya y Birmania.

El arroz es el alimento básico del sureste asiático y su exportación por los países de la región tiene un impacto fundamental en su cotización a nivel mundial, ya que representa el 50% de la totalidad de las exportaciones de todo el mundo.

Primer productor mundial, Tailandia ya había abogado a favor de una acción conjunta al anunciar, el 30 de abril, su intención de crear un cartel junto con Birmania, Camboya, Laos y Vietnam, para fijar el precio del arroz bajo el modelo de la Organización de los Países Exportadores de Petróleo (OPEP).

Vietnam, segundo exportador mundial, anunció a fines de marzo que reduciría sus exportaciones este año de 4 a 3,5 millones de toneladas. Numerosos supermercados y tiendas fueron tomados por asalto en este país tras rumores de una posible escasez.

En Camboya, el alza de los precios obligó a fines de abril al Programa Alimentario Mundial de Naciones Unidas (PAM) a suspender indefinidamente un programa de reparto de desayunos gratuitos a 450.000 colegiales de familias pobres.

Tercer exportador de arroz, India también prohibió las exportaciones de algunas categorías de arroz. La agricultura sustenta a dos tercios de los 1.100 millones de habitantes de ese país, donde 300 millones de personas viven con menos de un dólar por día.

"Tradicionalmente el arroz se consume en el lugar donde se produce, es por ello que la oferta en el mercado internacional es extremadamente reducida", indicó Pincus. Cuando los compradores ven que la oferta es limitada, los precios se disparan. Es lo que pasa actualmente", explicó.

Indonesia no limitó oficialmente sus ventas de arroz al exterior pero decretó que sólo se podrá exportar cuando las reservas nacionales sean superiores a tres millones de toneladas.

En Filipinas, ante la creciente tensión, el ejército desplazó tropas para la distribución de arroz en los barrios pobres de Manila.

"Cuando la gente tiene hambre, se desespera y opta por soluciones desesperadas", advirtió Damien Kingsbury, profesor de la universidad australiana de Deakin.

Asia teme que el precio de los alimentos acabe con el progreso

MADRID.- Los precios al alza de los alimentos pueden devolver a millones de personas a la pobreza en Asia y dar al traste con una década de progresos, dijeron el domingo los líderes regionales, al tiempo que pedían un incremento de la producción agrícola para cumplir con la creciente demanda.

Asia - cuna de dos tercios de los pobres del mundo - corre el riesgo de sufrir revueltas sociales después de que los precios de trigo y arroz se hayan doblado en el último año, obligando a la población a gastar más de la mitad de sus ingresos en comida, dijo el ministro de Economía japonés, Fukushiro Nukaga (en la imagen), durante la reunión anual del Banco Asiático del Desarrollo (BAD).

Si los precios de los alimentos crecen un 20 por ciento, 100 millones de pobres de Asia podrían verse forzados a volver a la pobreza extrema, advirtió el ministro de Economía indio, D. Subba Rao.

"En muchos países eso significará revertir los progresos hechos en reducir la pobreza en la última década de crecimiento", dijo Rao en Madrid.

Un aumento del 43 por ciento de los precios mundiales de los alimentos en el año que terminó en marzo generó violentas protestas en Camerún y Burkina Faso, así como marchas en Indonesia tras informaciones de muertes por hambruna.

Muchos gobiernos han introducido ayudas o restricciones a la exportación para contrarrestar los crecientes costes, pero eso sólo ha exacerbado el incremento de los precios en los mercados mundiales, según Nukaga.

"Los más afectados son los segmentos más pobres de la población, especialmente la población urbana", dijo Nukaga a los delegados.

"Tendrá un impacto negativo en los patrones de vida y su nutrición, una situación que puede llevar a disturbios sociales y recelos", añadió.

El BAD estima que los más pobres de la región de Asia Pacífico gastan un 60 por ciento de sus ingresos en comida y un 15 por ciento más en combustible.

Japón es uno de los 67 miembros del BAD reunidos en España para discutir medidas para afrontar los cambios del clima y la creciente demanda que ha terminado con décadas de comida barata en los países en vías de desarrollo.

La región tiene tres veces más población que Europa- unos 1.500 millones de personas que viven con menos de dos dólares al día.

El arroz es básico en la mayoría de los países asiáticos y una escasez amenazaría la estabilidad, lo que hace que sus gobiernos sean extremadamente cuidadosos con su precio.

La elevada inflación, motivada por los alimentos y las materias primas, ha encabezado la agenda de la reunión anual del BAD.

El banco pidió el sábado medidas inmediatas de los gobiernos mundiales para combatir el aumento de los precios y prometió nuevas ayudas para ayudar a dar de comer a los más pobres de la región.

Las Naciones Unidas dijo que los pobres rurales eran una bomba de relojería política en Asia que sólo podía desactivarse con una mayor inversión agrícola y tecnológica.

El BAD niega favorecer a las potencias en Asia

MADRID.- El Banco Asiático de Desarrollo rechazó el domingo críticas de que está descuidando a los países más pobres de la región y centrando sus préstamos en potencias emergentes como China e India.

Las críticas hechas por el diario The Wall Street Journal son "perturbadoras" y "desinformadas" dijo Supachai Panitchpakdi (en la imagen), presidente del panel que preparó la estrategia a largo plazo del banco ADB por sus siglas en inglés.

El funcionario, que insistió en que el banco sigue dedicado a ayudar a los más necesitados, habló en momentos en que el banco celebra en Madrid su reunión anual, que ha sido dominada por los altos precios mundiales de los alimentos y los peligros que eso representa para Asia, donde viven dos terceras partes de los pobres del planeta.

El sábado, el banco anunció fondos de emergencia para ayudar a los países pobres que han sido afectados por los precios del arroz, que casi se han triplicado en los últimos cuatro meses. Pero advirtió que los precios pudieran seguir subiendo y obstaculizarían el crecimiento en la región.

En un editorial del 1 de mayo, el Wall Street Journal subrayó que el banco con sede en Manila prestó considerables sumas el año pasado a países como Vietnam (1.500 millones de dólares), India (1.400 millones) y China (1.300 millones). Esos tres países tienen enormes reservas de divisas gracias a sus economías en auge.

Mientras tanto, Afganistán asolada por una guerra, recibió 193 millones de dólares en préstamos del ADB el año pasado, mientras que Timor Oriental recibió 21 millones de dólares.

"Al prestarle a países que tienen enormes reservas de ahorros, esos gobiernos no tienen que asumir responsabilidad por proyectos de infraestructura que muy fácilmente pudieran costear", dijo el editorial.

El ADB fue creado en 1966 para combatir la pobreza por medio de la promoción del desarrollo.

El banco dijo que actualizar su misión es vital porque se proyecta que 90% de las personas en esa región de rápido crecimiento van a ser de ingresos medios para 2020.

Un banco de desarrollo como el ADB debería reducir la dependencia de países pobres de ayuda foránea, en lugar de aumentar sus préstamos, dijo el editorial del Wall Street Journal. De hecho, en su reunión en Madrid, el banco anunció un aumento de 60% en las donaciones.

La ONU ultima su nuevo plan para afrontar la emergencia alimentaria

GINEBRA.- La ONU prepara la puesta en marcha de un nuevo plan para combatir la crisis alimentaria mundial provocada por la escalada de los precios de la comida, que ha generado disputas sobre la restricción de exportaciones agrícolas y el uso de biocarburantes.

Tras una reunión de 27 agencias de la ONU e instituciones como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) esta semana en Suiza, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, anunció la creación de una nueva unidad de emergencia para enfrentar la crisis, que comenzaría a funcionar en junio.

Ban dijo que la inmediata prioridad de la comunidad internacional debe ser "alimentar a los hambrientos", y urgió a los países a financiar "de manera urgente y cabal" el Programa Mundial de Alimentos (PAM), que necesita 755 millones de dólares adicionales para hacer frente al aumento del precio de la comida.

Para mostrar la importancia del problema, el PAM advirtió de que la subida del precio del arroz le ha obligado a dejar de proveer el desayuno a 450.000 niños pobres en las escuelas de Camboya, entre otras cosas.

Estados Unidos respondió el jueves, cuando el presidente Bush pidió al Congreso desbloquear 770 millones de dólares de ayuda para enfrentar la crisis alimentaria mundial. El dinero se sumaría a otros 200 millones de dólares ya desbloqueados por Estados Unidos el 14 de abril. "Agradecemos al presidente de Estados Unidos su llamamiento urgente a combatir la crisis de hambre entre las poblaciones más vulnerables del mundo", dijo el viernes en Roma Josette Sheeran, directora del PAM, que depende de la ONU.

El director general del Banco Asiático de Desarrollo (BAD), Rajat Nag, advirtió, por su lado, de que en Asia1.000 millones de personas están afectadas por el aumento de los precios de los alimentos.

Tailandia anunció el miércoles que logró un acuerdo con Birmania Laos, Vietnam y Camboya para crear un cartel del arroz que influya en los precios del grano. Y Argentina, Brasil, Vietnam, India, Egipto, Kazajistán, Rusia, China y Nepal han optado por limitar la exportación de algunos productos agrícolas.

Pero Ban y otros funcionarios como el presidente del BM, Robert Zoellick, o el director general de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Pascal Lamy, han deplorado las limitaciones a la exportación y advertido de que sólo empeorarán la situación.

"Urgimos a los países a no utilizar prohibiciones a la exportación. Estos controles alientan el atesoramiento (de alimentos), suben los precios y perjudican a las personas más pobres del mundo", dijo Zoellick.

Lamy también dijo que estas restricciones a las exportaciones no son "buenas soluciones económicas" a corto plazo. "Es obvio que estas medidas resultarán en un mayor aumento de los precios", indicó.

Una propuesta de Japón y Suiza -dos grandes importadores de productos agrícolas- para limitar las restricciones a las exportaciones fue desafiada el miércoles en la OMC por Brasil y otros países en desarrollo nucleados en torno al G20.

Ban reclamó asimismo la revisión de los subsidios a los biocombustibles, considerados como una de las causas de la escalada de los precios de los alimentos, junto a una mayor demanda, las sequías y la especulación.

Pero el responsable de la nueva unidad de la ONU para enfrentar la crisis alimentaria, John Holmes, advirtió contra dar una respuesta demasiado apresurada al desarrollo de los biocarburantes. "En algunas regiones, es sensato producir biocarburantes, lo cual no es forzosamente el caso en otras", dijo Holmes.

El ex relator especial de la ONU para el derecho a la alimentación, Jean Ziegler, ha calificado de "crimen contra la humanidad" la producción masiva de biocombustibles. Brasil, segundo productor mundial de etanol a partir de caña de azúcar, detrás de Estados Unidos, que lo produce con maíz, niega tajantemente que los biocarburantes sean los culpables del aumento de los precios de los alimentos.

(Palacio de las Naciones, en Ginebra)

La UE confirma el final anunciado de la bonanza económica española

BRUSELAS.- Las previsiones económicas para 2008 y 2009 difundidas por la Comisión Europea dieron forma esta semana a una situación que se venía vislumbrando desde hace algún tiempo: el final anunciado de la bonanza económica española, que dejará de crecer al ritmo de los países emergentes.

En efecto, Bruselas prevé una fuerte desaceleración del crecimiento de España en 2008, al 2,2% del PIB (Producto Interno Bruto), en lugar del 2,7% que había avanzado en su anterior estimación, de febrero pasado.

Este movimiento debería acentuarse en 2009, con un crecimiento de apenas un 1,8%, que coloca a España muy cerca de la media de la Eurozona, estimada para ese año (1,5%) y por primera vez en una década por debajo del 2%.

Estas magras cifras, que no son del todo malas en un contexto europeo que verá crecer a Italia apenas un 0,5% este año y un 0,8% el próximo, no son comparables en ningún caso con los de la década de oro de la economía española, de 1997 a 2007.

Desde 1997 hasta 2001, la economía española creció a un ritmo espectacular del 4,4% del PIB, lo que le permitió recortar de forma acelerada la diferencia que le llevaban los países más desarrollados de la Unión Europea.

Esta situación se mantuvo entre 2002 y 2006, con un porcentaje algo inferior, del 3,3% del PIB, pero siempre muy por encima de la media europea para cada año. En 2007, la diferencia se mantuvo: España creció un 3,8% y la Eurozona un 2,6%.

Sin embargo, y como quedó dicho, estas cifras parecen pertenecer al pasado, ya que en 2008 España crecerá un 2,2% contra un 1,7% de la zona euro, y en 2009 lo hará en un 1,8% contra un 1,5%.

Esta desaceleración tiene lugar en un contexto de alta inflación, que Bruselas estima será del 3,8% en España para 2008, muy por encima del 3,2% previsto para la Eurozona.

La inflación en España se situó en marzo en el 4,6% internanual, su nivel más alto de los últimos 11 años, en medio de la disparada de los precios de la energía y los alimentos.

El análisis de Bruselas de la economía española coincide en buena parte con el del Gobierno, que admitió el final de una década de bonanza económica y un aumento del desempleo a raíz del brusco freno de la actividad en el sector de la construcción, uno de los motores de su crecimiento.

Según el informe de la Comisión Europea, la contracción del sector de la construcción y la vivienda, la reducción del consumo interno y los desequilibrios de la balanza comercial exterior son las tres principales razones de la desaceleración del crecimiento en España.

Por su lado, el Gobierno se refirió al impacto de las turbulencias financieras internacionales, el frenazo de la construcción y el encarecimiento de los precios de materias primas energéticas y de ciertos productos alimentarios.

La gran diferencia entre una y otra estimación es que mientras Bruselas prevé un ajuste "más rápido" en el área de la construcción en 2009, Madrid ve la actual situación como un respiro, estimando que el crecimiento se reanudará en 2010 con una expansión del 2,8%, a lo que seguirá un aumento del 3,1% en 2011.

Queda por ver las consecuencias de esta coyuntura en el empleo, que ya ha comenzado a sufrir la desaceleración, de acuerdo con datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), que cada tres meses publica el Instituto Nacional de Estadística (INE), dependiente del ministerio de Economía.

Según la EPA, la tasa de desempleo española se situó en el 9,6% de la población activa en el primer trimestre de 2008, frente al 8,6% del último trimestre del pasado año. Estos porcentajes están bastante por encima de la media del 7,1% registrada en la Eurozona en marzo, su tercer mes consecutivo en el nivel histórico más bajo del espacio de la moneda única, compartida por 15 países.