lunes, 26 de enero de 2009

Afectados españoles por Madoff contestan a Botín que cinco semanas son suficientes para decidir acciones legales

MADRID.- Los representantes legales de los afectados por el fraude de Bernard L. Madoff contestaron hoy al presidente del Banco Santander, Emilio Botín, que "cinco semanas son suficientes para analizar el fraude y decidir sobre la asunción de responsabilidades frente a la clientela inversora", según el abogado defensor de cerca de un centenar de afectados, Fernando Zunzunegui.

Zunzunegui añadió que este tiempo también es "suficiente" para "plantearse las acciones legales contra el HSBC", como entidad depositaria del dinero de los clientes en Bernard L. Madoff Investment Securities.

Botín afirmó hoy durante la junta de accionistas que el banco "está evaluando el ejercicio de acciones legales" ante la estafa de Madoff y que están "analizando todos los aspectos relacionados con este tema". La estafa se destapó el pasado 13 de diciembre y la entidad cántabra confirmó pérdidas por valor de 2.330 millones de euros al día siguiente.

"El Banco de Santander ha informado al mercado de los datos agregados pero no a los clientes, que siguen esperando una rendición de cuentas", afirmó el abogado.

El despacho madrileño Zunzunegui se ha unido al bufete barcelonés Jausas para la defensa de casi un centenar de afectados y actualmente preparan reclamaciones extrajudiciales con la finalidad de buscar una salida negociada, sin descartar la vía judicial.

"Existe una clara responsabilidad del banco como emisor del producto en caso de los contratos financieros estructurados y como comercializador de participaciones en fondos Optimal", explicó Zunzunegui.

El Banco Santander fue el principal comercializador de fondos Madoff en todo el mundo a través de su gestora Optimal, principalmente en España y Lationamérica, y el único en distribuirlo entre clientes minoristas de sucursal.

Zunzunegui y Jausas están estudiando caso por caso, ya que sus clientes son, por un lado, instituciones que invirtieron varios millones de euros y, por otro, clientes individuales con inversiones de entre 300.000 y 600.000 euros.

Los primeros adquirieron participaciones en fondos Optimal en compras directas, mientras que los clientes individuales invirtieron en dos tipos de productos: el llamado 'Contrato financiero estructurado miltiestrategia Optimal', que jurídicamente sería un contrato atípico, y contratos 'unit linked' referenciados a una cesta de valores Optimal, según apuntó Zunzunegui.

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