"Muchos de los fondos han perdido parte de sus activos, por lo que quizás las negociaciones en los próximos meses llevarían a un cambio en la fecha de la privatización", aclaró el viceministro de Finanzas checo, Ivan Fuksa.
Fuksa dijo en una conferencia que el Gobierno aún espera obtener ingresos por valor de 100.000 millones de coronas checas (3.600 millones de euros) por la venta, originalmente prevista para este año.
"Si el Estado consigue un precio que no es interesante, puede decir que 'no, gracias', y desistir de su intención de vender", añadió Fuksa, quién dijo que el Gobierno está esperando a aprobar las condiciones para la venta en septiembre de este año, no en el verano, como se planeaba anteriormente.
Por su parte, el responsable del aeropuerto, Miroslav Dvorak, afirmó hoy en declaraciones a la prensa local a principios de este mes que calculaba el precio del aeródromo en cerca de 75.000 millones de coronas checas (2.700 millones de euros), valor calculado en base a las valoraciones del mercado de otros aeropuertos según la disponibilidad del crédito.
El ministro de Transportes del Gobierno checho, Ales Rebicek, aseguró que el Ejecutivo no venderá el aeropuerto por menos de 50.000 millones de coronas checas (1.790 millones de euros).
Entre las oferentes interesados en el aeropuerto de Praga, se encuentra el operador del aeródromo de Viena Flughafen Wien, el operador alemán Fraport, el francés France's Aeroports de Paris, así como los grupos de capital riesgo checos PPF Investments, Penta Investments y J&T.
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