"Vemos la solidaridad, que se traduce en infraestructura social, atención a los pobres y generación de empleos, como la vía para enfrentar la crisis que se nos viene", dijo Fernando Barillas, vocero de la Presidencia.
El financiamiento, sin embargo, dependerá de la aprobación de préstamos y la flexibilización del presupuesto, para lo que el ejecutivo depende de un congreso donde no tiene mayoría.
Entre los planes concretos del ejecutivo figura la ampliación de varias importantes rutas del país y la construcción de escuelas centros de salud y hospitales con lo que esperan crear empleos.
El presidente anunció que ampliarán la inversión en el programa de transferencias económicas condicionadas "Mi Familia Progresa", en el que entregan dinero en efectivo a cambio que las familias envíen a sus hijos a la escuela y les den chequeo médico regularmente.
Además buscarán agilizar la interconexión eléctrica con México e impulsar proyectos de electrificación rural además de fomentar otras iniciativas energéticas para abaratar el costo de la electricidad en el país.
También prevén reformar el código laboral para facilitar la creación de empleos de tiempo parcial.
Por aparte, la Junta Monetaria redujo la tasa de interés líder de 7,25% a 7% para fomentar el crédito y la inversión.
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