lunes, 5 de enero de 2009

La construcción seguirá destruyendo empleo en España y bajará de los dos millones de trabajadores este año

ALMERÍA.- El ritmo de pérdida de empleo en la construcción se mantendrá durante los próximos meses, de tal manera que el sector bajará de los dos millones de trabajadores en el primer trimestre de este año, según un informe de coyuntura sobre esta actividad elaborado por la Fundación Cajamar.

"En el futuro, si las medidas anticrisis no lo evitan, es de esperar que continúe el ritmo de destrucción de puestos de trabajo en el sector de la construcción", señala la entidad, que entiende que ese ritmo sólo podrá verse ralentizado por la intensificación de la obra pública.

En cualquier caso, considera que "es más que previsible" que siga reduciéndose el número de efectivos hasta situarse por debajo de los dos millones de empleados en los primeros tres meses de 2009.

De otro lado, el estudio apunta que es probable que la rebaja que está experimentando el Euríbor en las últimas semanas no logre reactivar la demanda de compras de viviendas, dado que las entidades financieras se han anticipado elevando sus primas de riesgo como vía para compensar el incremento de la morosidad.

En opinión de la entidad, "ya no se trata de un problema en el precio de la financiación, sino del mayor riesgo de crédito que se asocia a todo lo relacionado con la construcción".

Por todo ello, considera "muy posible" que el "declive" de esta actividad se mantenga en los próximos meses, sobre todo como consecuencia del subsector de construcción de viviendas.

Para los expertos de Cajamar, el retroceso del sector de la construcción a escala nacional se justifica por el parón sufrido por la construcción residencial, "que no acaba de ser relevada por las iniciativas de obra civil que se llevan a cabo por las distintas administraciones públicas".

"La situación que atraviesa el sector de la construcción residencial es muy preocupante y no existe ningún indicio que haga pensar en la próxima estabilización de sus indicadores", constata el estudio de la Fundación. "Tanto la oferta como la demanda del sector presentan serios síntomas de contracción que hacen necesaria la intervención estatal", añade.

En este punto, señala la posibilidad de "reconvertir en viviendas de protección oficial (VPO) el exceso de vivienda libre sin vender antes de incrementar aún más la oferta".

En cuanto a las medidas aprobadas en España, la Fundación Cajamar indica que "requerirán su necesario periodo de puesta en marcha para que comiencen a tener los efectos deseados" y advierte de que "desafortunadamente el subsector residencial no espera y lastra aún más la construcción en su conjunto, que muestra una mayor exposición a los problemas de la economía nacional e internacional".

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