El presidente del Banco Central de Nicaragua, Antenor Rosales, señaló en conferencia de prensa que la tasa de inflación proyectada es inferior al 13,7% acumulado en el 2008, producto del descenso en los precios del petróleo.
Las medidas anti-inflacionarias adoptadas el año pasado continuarán en el 2009.
Apuntó que dichas medidas incluyeron reducción de aranceles a la importación de productos básicos y alimentos, así como distribución de granos básicos a través de una red estatal que vende a precios reducidos.
Informó que han estado trabajando en un plan económico de emergencia, que ya fue aprobado por el gabinete económico y será anunciado en los próximos días por el presidente Daniel Ortega.
Destacó que en este plan económico de emergencia, serán prioridad las acciones y medidas para promover la producción, el crecimiento de la economía y el empleo ante la crisis financiera internacional.
El gobierno nicaragüense espera que la crisis se manifieste en el país con una disminución de las remesas familiares enviadas desde el exterior, además de una caída en las exportaciones y el flujo de créditos internacionales.
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