General Motors Corp. también podría presentar su plan al gobierno. Ambas empresas deben presentar sus proyectos de reestructuración ante el Departamento del Tesoro para especificar cómo devolverán los préstamos y cómo se convertirán nuevamente en empresas rentables.
Chrysler afirmó en un principio que requeriría solamente otros 3.000 millones de dólares, además de los 4.000 millones que en préstamos del gobierno recibió en diciembre. Pero el martes informó que necesitará otros 2.000 millones de dólares para sobrevivir al desplome sin precedentes en la industria automotriz.
La empresa, con sede en Auburn Hills, Michigan, indicó que había llegado a acuerdos fundamentales con sindicatos, distribuidores, proveedores y prestamistas sobre la concesiones solicitadas por el gobierno en los anteriores préstamos.
Chrysler dijo también que reducirá un turno de producción, retirará 100.000 unidades de la capacidad de producción y disminuirá costos por 700 millones de dólares.
Dos personas que fueron informadas del plan de GM dijeron el lunes que hubo avances hacia un acuerdo con el sindicato. Ambas fuentes solicitaron el anonimato porque las negociaciones son privadas.
GM tiene una deuda de 28.000 miles de millones de dólares no asegurada, mientras que Chrysler debe 9.000 millones de dólares, gran parte de la cual sí tiene garantía.
GM tiene que pagar unos 20.000 millones de dólares a un fondo de seguro de salud del sindicato, mientras que Chrysler debe pagar unos 9.900 millones de dólares.
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