El Congreso español rechaza obligar a dar créditos a los bancos que acudan al fondo de liquidez

MADRID.- El Pleno del Congreso de los Diputados rechazó hoy una moción de ICV que pretendía que se condicione la compra de activos financieros y el otorgamiento de avales públicos a las entidades financieras a que éstas aumenten los créditos a familias y pymes y los prestamos hipotecarios, así como al reparto de dividendos en metálico durante 2009 y a la limitación de los salarios de sus directivos.

Sin embargo, PSOE e ICV alcanzaron un acuerdo de mínimos para votar pos separado uno de los puntos de la moción, relativo a establecer las medidas oportunas con el objeto de que el subsidio de paro o el sueldo equivalente al Salario Mínimo Interprofesional (SMI), no pueda ser embargado en caso de ejecución de la hipoteca.

Esta iniciativa es consecuencia de la interpelación que Herrera dirigió el pasado miércoles al vicepresidente económico del gobierno Solbes, al que arrancó la observación de que los dividendos excesivos de algunas entidades y los salarios exorbitantes de sus responsables son "éticamente criticable", si bien dejó la decisión sobre este tema en manos de sus juntas de accionistas.

El diputado de ICV, Joan Herrera, exigió que las medidas en apoyo a la banca se "paralicen" si no se impone a la banca estas condiciones, así como al aumento de los préstamos dirigidos a consumidores y empresas y de las subrogaciones de préstamos hipotecarios, especialmente en vivienda protegida.

El parlamentario ecosocialista recuperó su petición para crear una Oficina Parlamentaria de Seguimiento, Evaluación y Control Público del plan de compra de activos del Gobierno que cuente con la participación activa de al menos un miembro de cada uno de los grupos parlamentarios y a dotarla de recursos técnicos y humanos para su óptimo funcionamiento.

Por último, reclamó que se inicie la reforma y reestructuración del Instituto de Crédito Oficial (ICO), con el objeto de permitirle intervenir con mayor agilidad en el mercado minorista, abriendo una nueva línea de avales a créditos para la compra de viviendas protegidas, así como nuevas vías de avales para pequeña y mediana empresa.

La socialista Gloria Elena Rivero defendió que la compra de activos ha sido una medida imprescindible para garantizar la solvencia de los bancos, y aseguró que no es posible forzar a los bancos a limitar sus dividendos y los salarios de sus directivos si no se recapitalizan antes, una acción que, por ahora, no se contempla.

El diputado del PP Juan Manuel Albendea censuró la ineficacia de las medidas de liquidez al sector financiero, a su juicio motivadas por la tardanza del Gobierno en reaccionar, motivo por el que, a su juicio, no se han trasladado en la concesión de créditos a familias y empresas.

El portavoz económico de CiU, Josep Sánchez Llibre, expresó su "coincidencia en el fondo" con las medidas recogidas en la medida, aunque mostró su rechazo a puntos como la "nacionalización de la banca" a la que llevaría la prohibición de repartir dividendos. Este punto también fue rechazado por el representante del PNV, Pedro Azpiazu, quien sin embargo aplaudió la pertinencia de la moción.