Martínez señaló que, si bien en la primera disposición de fondos para esta nueva línea de crédito realizada hace diez días "sólo hubo una entidad que demandó diez millones de euros" (en alusión a La Caixa) "todo hace suponer que la segunda disposición va a ser masiva, de varios cientos millones de euros, porque las entidades están diciendo que hay una avalancha de empresas que están acudiendo a las sucursales para pedir esta linea".
Esta línea pone a disposición de los autónomos y las pymes 10.000 millones de euros, de los cuales 5.000 millones son aportados por ICO y 5.000 millones son aportados por las entidades de crédito participantes en la iniciativa, que estará vigente hasta el 21 de diciembre de 2009 o hasta el consumo de los fondos disponibles, si ése fuese anterior a la fecha indicada.
El importe máximo de financiación es de 500.000 euros por cliente y año, ya sea en una única operación o en varias, mientras que la comisión será del 0,40% del importe dispuesto, y el plazo de amortización de tres años, incluidos seis meses de carencia de principal.
Por su parte, el tipo de interés que se aplicará será el del tipo fijo que tome como referencia el ICO, más un margen que puede oscilar entre el 1,5% y el 2,5% --euribor más 250 puntos básicos--, o bien el tipo fijo que tome como referencia la entidad el crédito más dicho margen. Las entidades analizarán cada una de las operaciones y aplicarán un margen u otro en función del riesgo que implique.
Pueden acogerse a esta línea los autónomos y las pequeñas y medianas empresas con menos de 250 empleados, con un volumen de negocio anual no superior a 50 millones de euros y/o una cifra de balance general no superior a 43 millones, que no estén participadas en un 25% o más por empresas que no cumplan estos criterios y que notengan ninguna operación de mora con las entidades de crédito.
Para acceder a estas ayudas, los clientes tendrán que presentar en las oficinas de los principales bancos, cajas de ahorros y cajas rurales establecidos en España la documentación que cada entidad de crédito considere necesaria para estudiar la operación directamente, tras lo que esas solicitudes serán estudiadas, aprobadas y formalizadas por los bancos y cajas en las condiciones indicadas.
Cada entidad de crédito analizará la solicitud del préstamo y, en función de la solvencia del solicitante, determinará las garantías a aportar, que pueden ser, por ejemplo, hipotecarias, personales, avales mancomunados o solidarios, o Sociedades de Garantía Recíproca.
En cuanto al tipo de interés aplicable, el presidente del ICO señaló el viernes que estudia la posibilidad de "revisar" el fijado en noviembre para dotar esta financiación de un precio más favorable que facilite la adhesión de las entidades financieras a esta línea.
Martínez explicó que los departamentos de riesgo de las entidades de crédito que estudian estas solicitudes se encuentran con que "el factor riesgo de la persona que les va a pedir tampoco les ajusta mucho al precio" que ofrece la línea, fijado en "el euribor más 250 puntos básicos", y reconoció que "a lo mejor, si tuviera otro precio más alto se verían más capacitados" para aceptarlas.
Destacó, en la misma línea, que "las condiciones financieras han cambiado dramáticamente a nivel internacional" desde que fijaron los tipos de referencia en noviembre, de modo que "lo que valía a finales de noviembre, no vale ahora en enero".
"A lo mejor hay que revisarlo, pero no sé cómo", reconoció el presidente del ICO, quien comentó que "una vez lanzada la línea es muy complicado" modificar sus condiciones porque se trata de "un contrato firmado entre las partes y habría que revisar muchas cosas", y resaltó que, de hecho, es algo que "no se ha hecho nunca, pero eso no quiere decir que no se tenga que hacer".
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