QUITO.- El gobierno y la compañía Repsol YPF suscribieron el jueves un acuerdo transitorio de un año con el que el estado recibirá mayores ingreso y durante ese tiempo las partes negociarán un nuevo acuerdo, poniendo así fin a meses de disputas.
Hace unas semanas, el presidente Rafael Correa amenazó a Repsol y a la francesa Perenco con iniciar procesos de coactiva para cobrar deudas que mantenían con el estado. El 26 de febrero, la petrolera española y el gobierno anunciaron que habían llegado un acuerdo tras un año de negociación pero el jueves concretaron la firma del convenio.
El ministro de Minas y Petróleos, Derlis Palacios, se mostró satisfecho con "poder cerrar por fin un capítulo que ha sido largo y tedioso ... pero creemos que ya con la firma de este convenio ponemos la tapa al inconveniente y vamos a seguir trabajando".
En una rueda de prensa explicó que según el acuerdo temporal Ecuador pasará de tener el "17% (de participación del crudo extraído) y tenemos ahora aumentos que varían entre 28 y el 46% dependiendo del precio del petróleo, mientras más alto es el precio más alta es la participación".
En el acuerdo transitorio de un año en el que se aumenta la participación del estado en las ganancias petroleras. Tras ese plazo, las partes firmarán un nuevo acuerdo para pasar del actual contrato denominado "de participación" a uno nuevo, "de prestación de servicios".
En el contrato de participación vigente, parte del petróleo extraído pertenece a la empresa. En el de prestación de servicios, el estado le paga a la petrolera por la extracción del crudo un monto a determinarse con la entrega de los documentos y facturas correspondientes.
Repsol mantiene tres proyectos de explotación de petróleo en la Amazonia ecuatoriana y mantiene una producción de unos 47.000 barriles de crudo diarios. El acuerdo transitorio solo rige para dos de los tres proyectos: bloque 16 y campo Bogi-Capirón que producen unos 40.000 barriles.
Palacios destacó que se logró "una buena negociación". "No es intención del gobierno nacional ni expulsar empresas, ni terminar contratos porque sí, simplemente lograr mayor beneficio para el estado y lograr que se respete la soberanía del estado", dijo.
Por su parte, Sergio Affronti, gerente general de Respol YPF Ecuador resaltó en la misma conferencia de prensa "que este acuerdo más que una culminación es un punto de partida para todos para continuar trabajando conjuntamente".
Dijo que el acuerdo contempla el compromiso de la empresa y sus socios de invertir unos 315 millones de dólares en sus proyectos que se extenderán cuatro años más de lo que establecía el contrato original y terminaría en el 2018.
El convenio también contempla un "convenio de pago" de la deuda de 447 millones de dólares para cancelarla en plazos durante cinco años.
Las deudas corresponden a valores aplicados por una ley que modificó la repartición de las ganancias petroleras.
El estado no ha logrado un acuerdo con Perenco para que pague unos 358 millones de dólares y desde el 4 de marzo está reteniendo el 70% de su producción de petróleo para recuperar esos recursos.
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