Banco Santander prevé que su morosidad no llegará al 4,5% en España

MADRID.- El consejero delegado de Banco Santander, Alfredo Sáenz, adelantó hoy que la entidad no situará su morosidad en el nivel del 4,5% a finales de año en España, como apuntaban sus primeras previsiones, sino que la buena evolución de su negocio la colocará con toda probabilidad por debajo de este nivel.

Duran te la presentación a analistas de los resultados trimestrales, Sáenz explicó que sus previsiones contemplaban una morosidad a finales de año del 4,5% en España, pero que en estos momentos la velocidad de crucero hace prever que "no se va a llegar al 4,5%", añadió.

La tasa de morosidad del banco en el primer trimestre del año se situó en el 2,49%, porcentaje superior en 1,25 puntos al existente hace un año, mientras que la tasa de cobertura se colocó en el 80%.

En este sentido, el director financiero, José Antonio Álvarez, destacó que las entradas en mora en el trimestre se situaron en 6.500 millones, con un exceso de unos 2.000 millones de euros frente a los 4.500 millones del trimestre anterior.

Respecto a los resultados, Sáenz subrayó que el Santander ha vuelto a cerrar un trimestre "excelente" en un entorno complejo, y que el periodo ha sido un "test ácido" para la banca, que distingue a los bancos bien gestionados del resto de las entidades.

El consejero delegado subrayó que el banco se encuentra "claramente" entre las buenas entidades gracias a la evolución de los negocios operativos, la rentabilidad, su fuerte disciplina de costes y el esfuerzo por aumentar las dotaciones acorde con el momento del ciclo.

Asimismo, se mostró "optimista" en cuanto a la evolución del beneficio recurrente de la entidad para el año pese a las dificultades económicas, y aseguró que no prevé cambios en su política de dividendos, aunque ésta debe ser aprobada por el consejo de administración.

Asimismo, señaló que el banco cuenta con una gran capacidad para generar capital de manera orgánica y seguir pagando dividendos, y que la calidad del crédito le permitirá no cortar el grifo y seguir financiando a pymes y empresas si los proyectos son solventes.

Por otro lado, recalcó que la entidad no contempla ajustes de capacidad en términos de oficinas y que la excelente gestión de los gastos, el crecimiento de sus depósitos y los ingresos comerciales, así como su elevada disciplina de capital y liquidez, le permiten a afrontar los trimestres "con confianza y resultados sostenibles".

Respecto a sus últimas adquisiciones, Sáenz resaltó que se están alcanzando los primeros objetivos en sinergias y que las primeras fases de integración van bien, por los "cauces normales", por lo que la entidad está focalizada en estos procesos y no prevé nuevas compras "ni dentro ni fuera de Europa".