jueves, 2 de abril de 2009

El G-20 emprenderá acciones contra los paraísos fiscales para "proteger" los sistemas financieros

LONDRES.- Los líderes del G-20, que se reunieron hoy en Londres para buscar soluciones conjuntas a la crisis económica mundial, acordaron "emprender acciones contra las jurisdicciones no cooperativas, incluidos los paraísos fiscales" para "proteger las finanzas públicas y los sistemas financieros", según consta en el texto del acuerdo.

El grupo, que aseguró estar dispuesto a "aplicar sanciones" con este fin, apuntó que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha publicado una lista de países que no reúnen los estándares internacionales para el intercambio de información sobre impuestos.

De esta manera, el G-20 ampliará "la supervisión reguladora y el registro de las agencias de calificación" para asegurase de que estos países "satisfacen el código internacional de buena práctica, particularmente para evitar conflictos inaceptables de interés".

Por otro lado, los líderes de las principales economías del mundo renovaron el compromiso adquirido en su anterior reunión, que tuvo lugar en Washington, de no imponer "nuevas barreras a la inversión o el comercio de bienes y servicios".

De hecho, aseguraron que implantarán las medidas propuestas por la Organización Mundial del Comercio (OMC) para estimular las exportaciones y que no buscarán "refugio en el proteccionismo".

El acuerdo global alcanzado hoy en Londres contempla "un programa de apoyo para restaurar el crédito por 1,1 billones de dólares (billones de euros) adicionales por parte de los bancos de desarrollo multilateral", de los que la mitad irán al Fondo Monetario Internacional (FMI). Esto elevará el montante total de los programas de estímulo a 5 billones de dólares (billones de euros) a finales de 2010.

El grupo también desveló que "los bancos centrales han prometido mantener las políticas expansivas mientras sea necesario y usar todos los instrumentos disponibles de política monetaria, incluidos los no convencionales, para la estabilidad de los precios".

Además, se creará un nuevo Consejo de Estabilidad Financiera (FSB por sus siglas en inglés) con una dirección fuerte, para que suceda al Foro de Estabilidad Financiera (FSF por su siglas en inglés), en el que estarán incluidos todos los países del G-20, los miembros del FSF, España y la Comisión Europea (CE).

La principal función de la nueva institución debería ser "colaborar con el FMI para advertir con antelación de los riesgos financieros y macroeconómicos y de las acciones necesarias para abordarlos".

El G-20 también se compromete a "ampliar su regulación y supervisión de las instituciones financieras importantes del sistema, sus instrumentos y sus mercados", incluidos "los 'hedge funds' de importancia sistémica".

No hay comentarios:

Publicar un comentario