Según explicó en un comunicado el grupo vasco, de los 16.770 millones facturados, 6.511 millones correspondieron al Área Industria, 9.073 millones al Área Distribución y 1.186 al de Finanzas.
La Corporación destacó que 2008 ha sido un año caracterizado por el "colapso" del sistema financiero global, la profunda crisis crediticia, la abrupta caída del consumo y del sistema productivo en el último cuatrimestre y el desplome inmobiliario en el conjunto de España.
En esta coyuntura, subrayó que Mondragón obtuvo un Ebitda --resultado bruto de explotación antes de deducir intereses, amortizaciones e impuesto sobre sociedades-- de 1.734 millones de euros frente a los 1.792 millones de 2007, lo que representa un descenso del 3,2%. Los 1.734 millones de Ebitda supusieron un 10% de los ingresos totales.
La Corporación destacó que la cifra de Ebitda es "prácticamente similar", en términos homogéneos, a la generación de recursos logrado en 2007, "a pesar de las dificultades surgidas en 2008 fueron muy superiores a las del ejercicio anterior".
Mondragón afirmó que esta "excelente" generación de recursos se vio afectada por el incremento de los gastos financieros derivados de los altos tipos de interés vigentes durante la mayor parte del año, por el aumento de las provisiones para poder hacer frente a posibles situaciones de morosidad de clientes y por el impacto de la nueva normativa contable internacional.
Todo ello, según destacó la Corporación, incidió en un "recorte notable" de los resultados consolidados corporativos que se situaron en 71 millones de euros, un 90% menos que en 2007 (711 millones).
Mondragón indicó que, en todo casos, esos resultados son "positivos", teniendo en cuenta la "dureza" del ejercicio, la "fuerte" caída del consumo y de la producción en el último cuatrimestre del año, la "notable elevación" de los gastos financieros y los ajustes contables derivados de la nueva normativa internacional.
Al cierre de 2008, los puestos de trabajo medios en Mondragón se elevaron a 92.773 frente a los 91.076 de 2007, lo que supone la creación de 1.700 empleos netos. Mondragón destacó que este aumento de plantilla responde a su "compromiso social con la generación de empleo".
En el área internacional, las ventas industriales representaron el 58,2% del total facturado en industria, destacando la apertura de 10 nuevas plantas productivas en el exterior y elevando su número a 73, distribuidas en 16 países: China (13), Francia (9), Polonia (8), Chequia (7), México (7), Brasil (5), Alemania (4), Italia (4), Reino Unido (3), Rumania (3), Estados Unidos (2), Turquía (2), Portugal (2), Eslovaquia (2), Tailandia (1) y Marruecos (1).
En conjunto, estas 73 filiales produjeron bienes por valor de 1.488 millones de euros -23% de las ventas industriales- y proporcionaron trabajo a 13.759 personas, el 34% de la plantilla industrial.
Entre las diez nuevas plantas en el exterior destacan las implantaciones de Batz en Chequia, México y China, situada esta última junto con las de Fagor Industrial y Fagor Arrasate en el Parque Industrial promovido por Mondragón en Kunshan.
Asimismo, destacó que en el segundo semestre de este año se iniciará en India la construcción de un parque industrial corporativo, que estará próximo a Mumbai.
Las inversiones globales ascendieron a 1.324 millones de euros, un 52,5% menos que en 2007, en el que se alcanzó los 2.787 millones. Según Mondragón, aún así, ésta constituye "una cifra muy importante, aunque no tan espectacular como la del ejercicio precedente", que incluyó "el esfuerzo inversor por la adquisición de Caprabo".
Mondragón destacó que las inversiones se destinaron principalmente al fortalecimiento de su desarrollo, a la mejora competitiva de las empresas, la expansión internacional y la promoción de nuevas actividades.
También que, sobre todo, en la segunda parte de 2008 se adoptaron una serie de medidas para enfrentar la crisis, dirigidas a la mejora de la competitividad de las cooperativas. Además, también se "multiplicaron" las decisiones para encarar con garantía el futuro.
Para ello, se apostó por intensificar la internacionalización en electrodomésticos (China y Rusia), potenciando la diversificación sectorial en máquina-herramienta (ferrocarril, aeronáutico, eólico), aunando capacidades para poder realizar ofertas integrales en el sector de troquelería (Batz-Matrici), intensificando la innovación en automoción (Fagor Ederlan, Maier) y en componentes para electrodomésticos. Otra de las estrategias fue la de diversificar geográficamente el negocio de elevación con la expansión en el Arco Atlántico de Orona, además de completar la oferta de estructuras en construcción.
Por otra parte, en distribución se produjo la apertura de 164 nuevos establecimientos y se aprobó el proceso de cooperativización, por el que se inicia la conversión en cooperativas de las actuales sociedades participadas de Eroski, así como el paso gradual de sus trabajadores asalariados a socios de trabajo.
En relación al área financiera, Mondragón destacó el incremento superior al 10% de los créditos a clientes, hasta alcanzar 16.576 millones, dirigidos preferentemente a la economía doméstica y a las pymes.
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