La querella judicial contra el banco, que casualmente se había comprometido con sus clientes a devolverles parte de sus pérdidas, fue presentada el pasado viernes 8 de mayo por parte de un inversor de Nueva York, Andrea Barron.
La demanda de Barron acusa de varios cargos tanto al banco como a los ejecutivos de su filial de gestión de activos, incluyendo al socio de gestión, director de inversión y co-presidente de la firma, Roman Igolnikov.
"Los acusados cometieron graves negligencias y violaron sus deberes profesionales" destaca la querella, que explica que la entidad no se comportó de manera adecuada con respecto a las inversiones del demandante "a pesar de las advertencias explícitas" realizadas por parte del propio equipo de investigación del banco.
Las inversiones de Barron en fondos UBP se mantienen desde septiembre de 2004 sin retiradas, según la denuncia presentada en el Tribunal Federal de Manhattan.
El banco UBP, con sede en Ginebra, ha sido una de las entidades privadas más impactadas por la estafa piramidal perpetrada por el ex presidente del Nasdaq y admitido que tiene una exposición global al fraude de Madoff de más de 1.000 millones de francos suizos (663 millones de euros).
No hay comentarios:
Publicar un comentario